Para ti

Autor: Alicia Beatriz Angélica Araujo

 

 

 

Hermano te hiciste mío 
un día en aquella iglesia,
con trinitaria excelencia 
cobijaste al desvalido,
que en el sendero perdido
sin consuelo caminaba.

Tú conmoviste mi alma,
misericordia conocí,
clamabas llegar al cielo,
intercediendo por mí.

Como a un ángel te miraba, 
y me hiciste sonreír,
olvidándome la pena,
en un instante sentí,
el amor de aquel cercano,
que gozaba al trasmitir,
la esperanza de Dios Padre,
que nos hace tan feliz.

Hermano que en el silencio, 
ganaste mi corazón,
el recuerdo de tu nombre,
fue tejiendo una oración.

De trama fuerte es este lienzo,
con hilos de distinto color:
amarillo, blanco y negro,
como quiso el Señor.

Ni distancias, ni diferencias,
unidos por una razón:
“solo porque Dios te ama,
y me siento amada yo”.