Alma mía
Autor: Alicia Beatriz Angélica Araujo
Alma mía no te rindas,
que el Señor está a la puerta.
Sé valiente en el combate,
piensa solo en la Promesa,
Eleva los ojos al cielo,
que el cuerpo no te retenga,
en las cosas de este mundo,
Que son efímeras e inciertas.
Alma mía, ten paciencia.
Mira la cruz, es tu fuerza,
el camino haces andando,
y su carga no molesta.
Ya llega nuestro Señor.
Ya su gloria manifiesta.
Recupera la alegría,
que pronto vendrá la fiesta,
de los hijos redimidos,
en la Morada eterna.
Junto a la gloria de Dios,
la justa recompensa,
al dolor que soportaste,
por amor y con entrega.