¿En que sueña Ud.

Autor: Adolfo Carreto          

 

   La interpretación de los sueños no es algo nuevo. La Biblia ya nos relata el famoso pasaje de José interpretando los sueños del Faraón. ¿Qué eso es una leyenda?. Puede. Pero en aquel tiempo la gente ya creía en semejantes leyendas, porque según nos relata el libro, la interpretación que José dio a los sueños del Faraón resultó correcta. Todos, de una u otra manera, queremos sacarle partido a lo soñado: puede ser para que nos toque la lotería, puede ser para protegernos de algo o de alguien, puede ser intentar esclarecer nuestro futuro, qué sé yo. Todos estamos convencidos que si lo hemos soñado, por algo será.

     Hoy esta interpretación discurre por otros caminos: el de la sicología, el de la parasicología, el de las modernas “ciencias” de la cabalística, de la astrología, de los videntes y de todos esos trucos. Estas especialidades no dan demasiado crédito a los versos de Calderón de la Barca: “que la vida es solo un sueño, y los sueños, sueños son”.

     Pues bien, parece que los sueños no son solamente sueños, sino algo así como profecías, como el que tuvo José cuando en sueños un ángel del Señor se comunicó los peligros que corría el niño por la locura de Herodes.

     En París existe un Instituto dedicado a la interpretación de los sueños. Ya nos han facilitado algunas claves para esta interpretación. Por ejemplo, si usted sueña con un gato negro, el significado de ese sueño no tiene nada que ver con la desgracia, con la traición o con la perfidia, como antiguamente se creía, y como todavía hoy creen más de uno. La interpretación que usted debe darle a ese gato negro del sueño, o a ese negro sueño del gato, es la independencia, feminidad, arraigo en el hogar y, para no romper con la tradición, en algunos casos de desconfianza.

     Esto es, que el gato negro no es tan malo como se piensa. ¿Hay algún fundamento en todo esto?. ¿De verdad la ciencia puede develarnos las intenciones del gato negro del sueño?. ¿Por qué reglas psicológicas se rige el Instituto francés?. ¡Sabremos de verdad nuestra segunda identidad o nuestra proyección de futuro mediante estas codificaciones de desinterpretación de los sueños?

     Claro, hay sueños y sueños. Y, aunque no creemos en gatos negros, ni cruzando la calle, ni oteando desde una ventana, ni dibujando en el subconsciente del sueño, es verdad que hay cosas ocultas que todavía pueden darnos muchas sorpresas, Y, a lo mejor, o a lo peor, los sueños no son solamente sueños, como decía Calderón. Porque cada quien tiene los suyos, y por algo los tendremos. Por eso, ¿cuáles son sus sueños?.