¡Jesucristo es el Rey!

Autor: Adhemar Cuellar

sitio web: Mensajes con poder   

 

¡Alégrese toda la tierra! ¡Alégrense las islas numerosas! ¡El Señor es Rey! (Salmo 97,1)

La frase ¡El señor es Rey!, parece que es incierta, esta frase parece ficticia  cuando vemos constantemente la violencia, las guerras, cuando miramos con frecuencia por los medios de comunicación que los asesinatos, robos, violaciones suman y se multiplican.

  En estos últimos meses he seguido con atención diferentes programas de televisión en los que invitan a diferentes  sicólogos, profesionales, y diversos personajes conocidos de la ciudad, estos programas los han realizado para cuestionar: ¿Por qué el incremento de la violencia y asesinatos? ¿A qué se debe el aumento de robos y asaltos?  Algunos decían que el problema está en la familia, el alto índice de divorcios, la migración del padre o madre a otro país en busca de empleo,  otros decían que los medios de comunicación son culpables por mostrar escenas violentas, mostrar escenas con chicas semidesnudas, por mostrar escenas de pornografía, otros decían que el aumento de concursos de belleza,  pero  la mayoría coincida en que se han perdido los valores, en las familias y la sociedad se ha perdido la Fe, la Esperanza y el Amor.

Ante los problemas actuales El salmo 97,1  nos da motivos para no caer en desesperación: ¡EL SEÑOR ES REY!   ¡Alégrese toda la tierra!,   esto es divinamente cierto, ¡Jesucristo es el Rey!  Pero más que reinar la tierra y el universo él quiere reinar en nuestra vida. El quiere reinar en la mente y el corazón de cada uno de nosotros.  El es la solución a todos los problemas del hombre y la humanidad, cuando el señor comienza a reinar van desapareciendo los frutos de la oscuridad, cuando Cristo reina: “la violencia, el odio, el adulterio, la envidia, el racismo, etc. desaparecen porque  ¡EL SEÑOR ES REY!  

En la misa del  pasado domingo la persona que dirigía las lecturas, antes de anunciar la segunda lectura, lee la hoja dominical y se equivoca, la lectura era: “El Señor nos amo hasta el extremo” y  ella dijo: “El Señor nos amo hasta el extranjero” (este error nos da una gran enseñanza)

Jesucristo siendo de condición divina, vino a este mundo para darnos su amor, un amor  que lo llevo a la muerte y muerte en la cruz.  Jesucristo “nos amo hasta el extremo”, por eso Dios le dio el más alto honor y el más excelente de todos los nombres para que ante el nombre de Jesús toda rodilla se doble y proclame que Jesús es el Señor, proclame que ¡Jesús es el Rey!  Jesucristo nos amo hasta el extremo, para que este amor llegue “HASTA EL EXTRANJERO”, El amor de Cristo no solo fue para Israel, sino que este amor ha llegado “hasta el extranjero” es decir hasta Bolivia, Colombia, México, Hasta toda América, Europa, Asia, África y Oceanía. Toda la tierra tiene la oportunidad de conocer que ¡JESUS ES EL REY!

El problema actual es que no aceptamos y reconocemos este título en nuestra vida. Algunos lo reconocen pero pasa un tiempo y se olvidan que ¡Jesús es el Rey!

Liduvina estaba preocupada porque ese día su amado Liduvino tenía que hacer un viaje a tierras lejanas,  viaje que los mantendría separados por  tres largos años. En el momento de la despedida Liduvina angustiada dice a su esposo: ¡No te olvides de mí! Escríbeme,  aunque sean diez letras. Pasaron tres meses y Liduvina va al correo para ver si le llego alguna carta de su amado. Ese día  le llego la anhelada carta, con la velocidad de un rayo, Liduvina abre la carta y con emoción comienza a leer el contenido con sorpresa de que esta misiva solo tenía 10 letras.  ¿Qué letras cree usted que contenían la carta?   Las diez letras que contenían la carta eran: ABCDEFGHIJ (Como Lidubina le había indicado escríbeme aunque sean solo diez letras, Liduvino ni corto ni perezoso fue obediente le escribió diez letras)…

Cuando una relación se ve afectada por la distancia, la comunicación es importante para que esta relación no se termine, por eso se utilizan: las cartas, el correo electrónico, el teléfono etc. Para decirnos aunque sean diez letritas.

Jesucristo para que no olvidemos su presencia utiliza todos los medios espirituales para hablarnos de diversas maneras, utiliza carteros espirituales para hacernos conocer las diez letras más importantes que no debemos olvidar y  que representan su poder.  Una pregunta: ¿usted sabe cuáles son estas diez letras?   La frase que escribe Jesucristo es: ¡YO SOY EL REY!

Jesucristo escribe esta frase a todos:

A los niños les escribe diciendo: ¡Yo soy el Rey! (no yu-gi-oh, el rey no es pokemon, no son los Power Rangers, el rey no son los videojuegos)

A los jóvenes les recuerda: ¡Yo soy el rey! (no los cantantes no Dady Yankee, el rey no es el chat, no el internet,  no las drogas)

A los hombres adultos les recuerda ¡Yo soy el rey! (no el dinero, no el alcohol, no el placer, no el deporte)

A las mujeres les recuerda ¡Yo soy el Rey ¡(no las telenovelas, no el materialismo, no las cirugías plásticas, no la ropa,  no la moda)

A los profesionales, a los científicos,  a los actores, a los deportistas  a los políticos, y a todo  ser humano que habita este planeta  les dice: ¡Yo soy el rey!,  ¡alégrese toda la tierra!

 Cuando Jesucristo reina en nuestra vida todo cambia: el bien vence al mal, la luz destruye la oscuridad, la paz hace que la guerra cese. El amor vence al odio.  

No quiero terminar sin antes hacerles conocer algo que descubrí al leer el capítulo 2 del evangelio  de Mateo (Mateo 2,13.19-20).  Este nos dice que cuando El rey Herodes intento matar a Jesús, el  tuvo que huir a Egipto. Y no fue hasta la muerte del Rey Herodes que Jesús volvió a Israel”

Esto nos enseña que mientras  haya un rey  Herodes en nuestra vida, llámese este rey el odio, el orgullo, mientras exista  el Herodes de la adicción, los vicios, la violencia, envidia, flojera, mientras exista el rey Herodes del mal.  Jesucristo   se alejara de nuestra vida, y El no retornara hasta que Herodes muera o desaparezca de nuestra vida. Vale decir que usted esté dispuesto a hacer morir al rey Herodes. Que usted renuncie a sus malas acciones, se arrepienta de sus pecados e invite a que vuelva el verdadero Rey: “EL QUE REYNA TODA LA TIERRA” y también quiere reinar en su mente y corazón, en su familia, en la sociedad,  y en el mundo entero.  

Oración con Poder:    Señor en este día te alabo y te doy gracias por tu palabra, gracias por que nos recuerdas que tú eres el único y verdadero Rey. En este momento te pedimos perdón por todos los reyes falsos que gobiernan nuestra vida, perdónanos por  sacarte de nuestra vida, de nuestra familia,  en este día, renunciamos al pecado, renunciamos al odio, a la violencia, a la envidia, al rey orgullo, renunciamos a todos los Herodes que nos gobiernan,  y te invitamos a que tu vuelvas a reinar, te abrimos las puertas de nuestro corazón para que tomes el control de nuestra vida y te conviertas en nuestro Rey:  ¡Tu eres el Rey Señor!  Por eso nos alegramos y regocijamos, ¡TU ERES EL REY! ¡ALEGRESE TODA LA TIERRA! Amén.