El medico

Autor: Adhemar Cuellar

 

 

Algo que muchos quisiéramos evitar,  y que tarde o temprano llega a nuestra vida, a veces con frecuencia o  1 vez por año  o quizás 1 vez en la vida,  es: LA ENFERMEDAD

¿Esta usted enfermo? ¿Esta  por hacerse alguna operación?

Un día Atanasio cae enfermo, acude al medico,  el cual le descubre una enfermedad en el corazón muy rara, la única salida para que Atanasio siga con vida era una cirugía del corazón:

El medico informa a su paciente de lo grave de la enfermedad, y recomienda que tendría que hacerse una cirugía ¡urgente! del corazón.

En el quirófano antes de la operación, el medico al saber el riesgo y el peligro de la cirugía dice a su paciente:

-No es por alarmarlo, pero necesitamos que usted nos indique a quien tenemos que llamar primero, en caso de alguna emergencia,  a quien llamamos en caso de complicarse la operacion.

Y Atanasio, preocupado con miedo y angustiado responde:

Si se complica la operación, si hay problemas con la cirugía, por favor llamen a otro medico…

 

¿Usted esta enfermo?

¿Qué tiempo que esta enfermo?

¿Cuántos médicos ha visitado y aun sigue enfermo?

En la Biblia encontramos a una mujer que estuvo por 12 años enferma:

San Lucas 8,43-44 “Entre la gente había una mujer que desde hacia doce años estaba enferma, con derrames de sangre, y que había gastado en médicos todo lo que tenia, sin que ninguno la hubiera podido sanar. Esta mujer se acerco a Jesús por detrás,  y toco el borde de su capa, y en el mismo momento el derrame de sangre se detuvo”

Queridos hermanos, algunos están enfermos, muy enfermos, y ya han gastado mucho dinero visitando un medico, otro medico y otro medico, lo mismo le había pasado a esta mujer que nos habla el evangelio, que había estado 12 años enferma, y había gastado todo lo que tenia en médicos,  pero al ver a Jesús, al enterarse que había un medico que sanaba toda clase de enfermedades, al enterarse que estaba pasando Jesucristo el medico que había sanado a ciegos, sordos, paralíticos, mudos,  Ella decide probar un nuevo medico,  decide cambiar de médico, la mujer decide acercarse a Jesucristo y con solo tocar el borde de su capa, queda completamente sana,  ¡Gloria a Dios!.

 

Imitemos a esta mujer, es hora de cambiar de medico, si desea hacerlo acérquese a Jesucristo, y pidale por su enfermedad, pero le recomiendo que cuando lo haga, antes de pedir que le sane de alguna enfermedad, pidale primero que sane su corazón que quizás esta herido, y lastimado, que sane su corazón que esta quizás lleno de odio, rencor y resentimiento.

 

Se recuerda de Atanasio, el personaje que al comenzar esta reflexión, estaba pasando por una cirugía del corazón, dicen que la cirugía fue todo un éxito y se recupero de la enfermedad, vivio por   25 años mas pero luego de eso vuelve a enfermar, esta vez, su enfermedad era mortal.

Atanasia, su esposa  al verlo muy mal, creyendo que de esa noche no pasaría con vida le dice a Atanasio:

Mi amor, te veo muy mal:

¿Hiciste tu testamento?  ¿Hiciste ya tu testamento?

Y Atanasio más con palabras de muerto que de vivo, le dice a su amada Atanasia:

Si mi amor no te preocupes, ya hice mi testamento puedes estar tranquila, porque deje todos mis bienes al medico que me salve la vida…

 

¿Y usted ya hizo su testamento?

Si esta sano o si esta enfermo, no pierda el tiempo, déjele todo, entréguele todo al único medico que le puede salvar la vida, al medico que da vista a los ciegos, abre los oídos de los sordos, entréguele todo  a aquel que hace andar a los paralíticos, entréguele todo a aquel que tiene poder para levantarlo hasta de la tumba, a aquel que tiene el poder para resucitar muertos, entréguele todos sus bienes, su cuerpo, su mente, su corazón su alma, a Jesucristo el Señor, Jesucristo el mejor medico , Jesucristo el medico del alma. ¡Gloria a El!  Amen.