Ama apasionadamente tu meta

Autor: Rosa Martha Abascal de Arton

 

Largo plazo... ¿qué es la visión de largo plazo? ¿Por qué la gente con éxito 
humano y trascendente ha insistido tanto en el largo plazo? 

1. Ambito material: Si una persona se come una semilla de maíz, allí se acabó el maíz. Si la siembra, tendrá un aplanta que le dará más comida y podrá ir asegurando el futuro, el largo plazo.

2. Ambito personal: Si en un conflicto sentimental, la persona opta por el camino de darle rienda suelta a sus sentimientos, en el momento quedará contento, satisfecho, pleno, pero perderá la paz, quizás una relación humana de amistad o de pareja que de haberse manejado bien, hubiera enriquecido el crecimiento humano y espiritual.

3. Ambito Nacional: Si en un problema político, se tapa el hoyo por salir del paso, sin resolver de raíz, sembrando paz, armonía, entendimiento, crecimiento, tarde o temprano ese problema será una bomba de tiempo que estallará con consecuencia a futuro impredecibles. 

Es sumamente esperanzador asistir a un evento como el organizado por Coordinadora Ciudadana y Yo Influyo en el cual, pudimos ver y sentir a hombres y mujeres, gobernantes y ciudadanos, líderes y pensadores con esta visión de largo plazo, con la mira puesta en un modelo de nación humanista, centrado en el bien ser y bien estar de todos y cada uno de los mexicanos. 

Es apasionante ver a una mujer, líder, Secretaria de Estado, casada, con dos 
hijas, humanista, exitosa, con una fuerza y una preparación que impregna sus 
discursos y sus acciones de feminidad, de esperanza y de visión de largo plazo. 

Es maravilloso sentir la respuesta de la gente que se ha dado cuenta, de que 
sólo con la alternancia no vamos a llegar a ningún lado, que ve con claridad 
que esa alternancia fue solo el primer paso, que asume su responsabilidad en 
la consolidación del cambio que todos queremos y que por lo tanto, se pone a 
trabajar y a participar poniendo el granito de arena que le corresponde. 

Es revitalizante ver a organizaciones ciudadanas que están renaciendo y siendo medios para que las personas, cada persona, pueda hacer oír su voz. 

Sentir esa comunión de objetivos, de metas, de largo plazo, rodeada de amigos, de ciudadanos, de gente que ama a México es una inyección de vitaminas para quien busca lo mejor para sus hijos y para su Patria. 

Yo, como nuestro Presidente, CREO EN MEXICO, creo que hay que luchar por 
forjar nuestro porvenir, porque es clara aquella frase tan sabida de que “cada pueblo tiene el gobierno que se merece” 

No podemos pedir lo que no damos, nuestro derecho y a la vez nuestra obligación como ciudadanos es informarnos, participar, analizar, pero sobre todo HACER lo que nos toca hacer, de manera solidaria, ayudándonos mutuamente y apoyando subsidiariamente a quien más lo necesita 

Hace poco, un conocido llegó enojadísimo con su jefe por como lo trataba, por lo mal que le pagaba, por la visceral de sus decisiones etc. Las quejas parecían no acabar. De pronto la muchacha del servicio se tropezó y tiró un refresco. El grito fue inmediato, seguido del insulto y de la amenaza “ 

¡¡Te voy a descontar el vaso de tu sueldo!!”. Indignada por tal hecho, lo enfrenté y le hice ver, como todo lo que el criticaba de su jefe era lo mismo que hacía con sus subordinados, y peor aún, porque se trataba de gente más vulnerable. Si no cambiamos nosotros, ¿con que derecho exigimos un cambio en los demás? 

El cambio se está empezando a dar en nuestra sociedad, estamos comenzando a 
despertar como Nación, como Patria, como México. El participar en una elección es ver al corto plazo “ya cumplí, ahora le toca a otros”. El participar día a día en tu trabajo, en tu familia, en tu labor social, en tu meditación, en tu formación, en Yo Influyo, pensando y aportando a tu Patria, ESO es construir con largo plazo, eso es sembrar para cosechar. 

Siembra en tus hijos ese amor apasionado por México, por sus valores, por 
sus ideales, siembra en ti mismo la semilla de la solidaridad, de la subsidiariedad, busca el Bien Común, respeta la dignidad de todas y cada una de las personas que te rodean. Siembra, cultiva y vas a cosechar, VAMOS a cosechar como país, VAMOS a recoger los frutos en algunos años. Solo recuerda que ya hay muchos que lo hacen, muchos que ya influyen porque han comprendido que quejarse no lleva a ninguna parte, que HACER, ACTUAR con congruencia, con pasión, con entrega, en comunión, es el camino correcto. 

No solo hay que saber a donde queremos ir, tampoco basta saber como llegar 
allí, necesitamos amar, sentir apasionadamente nuestra meta, nuestro largo 
plazo para sortear los problemas, tentaciones, obstáculos y escollos violentos y duros que nos encontraremos en el corto plazo. 

Todo lo que vale la pena cuesta, y mientras más vale, más cuesta y mientras más vale, más apasionadamente se le debe amar para trascender y llegar a tu meta, esa que te llevará a la felicidad temporal y eterna que nadie te podrá arrebatar jamás. 

Decídete, comienza hoy, INFLUYE YA.