Admoniciones 

Autor: Rafael Ángel Marañon

 

 

La rivalidad entre miembros de algunas iglesias por alcanzar un ministerio, son actos alocados y soberbios de muchos, que prefieren la aprobación de otros y los mejores lugares en vez de la paz entre hermanos. Buscan tener fama y reconocimiento social en las iglesias y fuera de ellas. No debemos envidiar el ministerio de otros. Hagamos bien el que tengamos encomendado. Buena obra pretende el que desea ser diacono o cualquier puesto oficial en la iglesia (1ª Timoteo 3:1) pero esperando que el Señor le dé el lugar que le corresponde en SU iglesia. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca. 11 A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén. 1ª Pedro 5:10.