Admoniciones 

Autor: Rafael Ángel Marañon

 

 
Continuamente nos sorprendemos a nosotros mismos censurando acremente a otros. Posiblemente lo que pretendemos de buena fe es mostrar preocupación por el hecho que nos lleva  a la crítica. Si miramos a las personas (y apretando, a los hechos) con ojo bueno veremos siempre un aspecto positivo. Algo de bondad en el mismo hecho malo, o de ejemplo para nosotros para que no caigamos en el mismo pecado. Lo que nos disponemos a exigir a otros debemos de mirar si nosotros lo cumplimos. Mateo7:1 y ss. No podemos pedir a otros respeto y consideración para nuestros fallos (porque tenemos fallos) si nosotros desde mucho antes de ponderar un hecho, no estamos dispuestos a absolver para ser absueltos o por lo menos a ponderar el hecho desde la más completa información posible. En la iglesia todo se hace para edificación. Si algo no edifica se deja y a seguir nuestro camino. Solo Dios conoce lo que hay en el corazón de cada humano.