Admoniciones 

Autor: Rafael Ángel Marañon

 

Es impropio de cristianos despreciar a la más mínima criatura sea animal o sea humana. Dios no crea nada ocioso, sino que todo es preciso en la creación de Dios pues Él lo ha creado. Todo lo creado lleva Su sello. No se debe denigrar o criticar a los demás y menos a los hermanos. Un profundo sentido de respeto debe presidir todos los juicios sobre cualquier situación. Lucas 6:42. Hemos de pensar, ante la más deleznable criatura, que nosotros seríamos iguales que ella a no ser por la misericordia de Dios. La alegría de haber sido elegido para Dios (por Dios mismo) debe llevarnos a una profunda gratitud por el maravilloso don y a una inmensa e inagotable  comprensión hacia las debilidades de los demás.