Admoniciones 

Autor: Rafael Ángel Marañon

 


¿Estás solo? ¿Tu fe te impide participar en cosas que son corrientes para los incrédulos? Es normal. Tú eres cristiano. Consuélate y reposa en Cristo. Él conoció como nadie la soledad en su grandeza. Alégrate de estar como Él, porque como Él, tendrás la compañía del Padre:... y me dejaréis solo; pero no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Juan 16:32.  Y la suya que Él prometió... y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Mateo 28:20. No estaremos solos en toda la eternidad que empieza... ¡hoy! Tomemos en serio las palabras de Jesús, Él no miente. Nuestros enemigos son las dudas y el descuido.