Admoniciones 

Autor: Rafael Angel Marañon



Si somos de cristo ¿que hacemos aun, juzgando a otras personas? Solo podemos juzgar hechos y estos con mucha circunspección. Juzgar a las personas es oficio de Dios. Si no podemos enmendarlos de algún error, dejémoslos. Mateo 15:13,14. Pongámonos nosotros a enmendar con ese mismo celo, nuestros pensamientos y nuestra conducta. Hay “faena” suficiente y que revierte necesariamente en el prójimo si se hace con rigor, Contender por la fe no es disputar con otros, sino mantenerla incólume. Judas3.

Las querellas con otras personas traen amarguras, y pueden ser para el fiel piedra de tropiezo. Santiago 3:14 al 18. El que replica al necio con el mismo argumento que el de su necedad, se hace tan necio como él. Proverbios.