Bautismos, y otras meditaciones (Parte 3ª)

Autor: Rafael Ángel Marañón   

 

 

Casi todas las religiones autollamadas cristianas  atacan al catolicismo, pero ellos tienen muchos “papas”, cuando no son ellos mismos unos “papitas” que todo lo saben y que están seguros de todo, porque en el conventículo en donde se han metido, han encontrado una identidad que les permite adquirir una superioridad que antes ni raspaban. Y tienen sus “profetas” que estos sí, están en la verdad. No faltaba más. ¿Por qué? ¿Por qué ellos lo dicen? ¿Sin más análisis, ni más criterio de examen o crítica?  ¿Por que sí? O ¡Porque sí!

 

Como decía Lope de Vega en sus SOLEDADES

 

O sabe Naturaleza

Más que supo en otro tiempo,

O tantos que nacen sabios,

Es porque lo dicen ellos

 

No hay quien busque la verdad, sino que se aferran a cualquier cosa que se les pone por delante, de modo que (por ejemplo) un militante en la denominación, “Testigos de Jehová”, es capaz de que un hijo se muera, antes que proporcionarle una transfusión; eso se dice que creen. Según me dicen los que entienden de estas cosas, no son arrianos, aunque sus teorías se asemejan mucho a estas herejías.

 

Otros no trabajan en sábado, porque eso les distingue de los demás (en tono superior, por supuesto), como observantes de la antigua Ley de Moisés.  O creen que por que no coman algo (que en el nuevo testamento está permitido), están haciendo un gran servicio a Dios y que ellos sí, ellos sí honran sus directrices. Bueno; eso es cosa de cada uno.

 

Se burlan de los católicos (ni ellos mismos saben de lo que se  burlan), pero ellos creen (de la misma forma) que muchos de sus extravíos, no son tan dignos de risa como la que ellos hacen de otros. Abominan de imágenes y de clérigos, y ellos tienen sus “vacas sagradas”, a las que otorgan unos agasajos y una absoluta obediencia ovejuna, cosa que no ocurre en el terreno católico. Y son estos burladores los que  determinan lo que sí se puede tener en un templo o lugar de reunión, aunque en casi nada de estas cosas estén de acuerdo entre sí. Como “la Parrala” unos dicen que sí y otros que no.

 

No quiero que nadie se sienta ofendido; no es esa mi intención al escribir esto. Respeto y apruebo lo que hacen todos y cada uno, cuando en espíritu y en verdad, adoran a Jesucristo y temen a Dios. Lo que no es cristiano, es mofarse de lo que a ellos no les cuadra, por su inclinación carnal: Dice la Escritura: El Señor juzgará a su pueblo. (Hebreos 19:30) Si tembláramos ante la omnipotencia de Dios, la unidad cristiana ya sería un hecho.

 

No se puede creer en lo que no se cree; se puede proclamar y asirse a ello, y ser comprendido por los demás que también, tal vez tengan lagunas en su mente, sobre el cuerpo doctrinal cristiano. Si hay reservas, téngase en cuenta lo que el apóstol Pablo dijo sobre estas cosas, aunque se refiriera concretamente a los alimentos, que creo extrapolable a todo asunto. Yo sé, y confío en el Señor Jesús, que nada es inmundo en sí mismo; mas para el que piensa que algo es inmundo, para él lo es. (Romanos 14:14)

 

Antes los homosexuales y otros abominaban del matrimonio, y durante muchos años fue así. Ahora ante la posibilidad de que el “Papá-Estado” pague pensiones y todo eso, ya ha cambiado la forma de pensar. Es decir antes las cosas eran así; ahora son asá, según las subvenciones, etc. El dinero, (mammón) siempre se yergue contra todo lo que le impide reinar sobre los hombres.

 

Ahora dicen que existe un movimiento llamado socialistas cristianos. Cuento algo: una chica finlandesa en España, trabajaba de auxiliar en una cocina. En las elecciones españolas, cuando se dieron los resultados, vino toda temblorosa diciendo. - han ganado los comunistas.- los que allí estaban se reían y le dijeron.- no te preocupes, solo son socialistas, no es como en tu país.- y ella exclamó: ¡que va! eso es lo que dicen, pero cuando ya están, solo son comunistas. Es una apreciación de una chica; de una chica que había huido de su país, por que no quería ser comunista.

 

Dios tenga misericordia de todos los que andamos por esta tierra a donde nadie nos invitó, ni dio lugar a elegir si venir o no, sino que estamos aquí porque nos han hecho y nos han dado vida. No nos hemos hecho a nosotros mismos. Que el Creador haga lo que tenga que hacer con su obra.

 

Por lo demás triunfa la política y la entronización del poder y del dinero. Cosa de hombres con sus grandezas y sus miserias. Lo diga, quien lo diga, y como se diga. El dios de la gente es el dinero y el poder. El enemigo espiritual, sabe mover las cosas con mucho poder y destreza. Pero Dios es el Omnipotente, y nada hay por encima de Él.

 

AMDG

 

 

ERROR DEL IRREDENTO

 

Se piensa el hombre irredento,

Que por sus propias acciones,

Se ganará en un momento

La salvación, con sus dones

 

La dádiva y mandamiento

No se cumplen con acciones;

Es por la gracia y aliento  

Del Señor, que da los dones.

 

Si en el plan de salvación

Aportas la buena obra,

Es para tu bendición.

 

Dios sabe premiar de sobra;

Y al que le ama con pasión

Le da la paz, sin zozobra.

 

Rafael Marañón

AMDG.