Trazos

Autor: Rafael Ángel Marañón

 

Poned sobre vosotros mi yugo y aprended de mí que soy manso y humilde de corazón y tendréis la  paz de vuestras almas.

Mateo 11:29

Que los ángeles caídos, estando primeramente en lo más alto fueran soberbios, no es tan insólito como que el hombre que siendo nada, se crea ser algo. El yugo ya lo lleva Jesús y te invita a compartirlo. Aprendiendo de Él, que habló, e hizo. Es yugo soportado ya por Cristo, ligero y fácil. Su poder hará. Tú confía.