Trazos

Autor: Rafael Ángel Marañón

 

Yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados y sanaré su tierra.

2º libro de Crónicas 7, 14

 

Tiempo de oración es este. Ya vemos como fracasa el esfuerzo humano. El ser humano, desde su estado de depravación ante Dios, no puede resolver la situación por la que pasa el cristianismo y el mundo en general.

El Señor espera que su pueblo ore y clame ante él, reconociendo debilidades y fluctuaciones. De este modo será la tierra renovada, y apresurada Su venida. Clamemos a Dios por sanidad para nosotros y para la tierra.