El gorrión ha hallado casa

(Dedicada a mi hermanito de alma: Franco de Jesús Sacramentado y de La santa Faz, Siervo Reparador del Corazón Eucarístico de Jesús)

Autora: Hna. Teresa de Jesús y de la Niña María

 

 

Tu gorrioncito ha encontrado casa
y en su vuelo ahora piensa
marcharse ya de su pueblo
a continuar su tarea.

Habitar con sus hermanos
es ya su única meta
pues los aires de este mundo
a veces tocan su puerta
y el desea solo tu viento,
tu Corazón el anhela.

Su pequeñez se abandona
al plan divino de Amor
que has soñado para el:
ser Fraile Reparador.

A tus brazos ya se ha dado
y escuchando tu voz
ha aprendido a consolarte
y entregarse en oración.

Su mirada puesta en Ti
le ayudará a mantener su vuelo
y tu, oh Dios lo elevarás
lo esconderás en tu pecho.

Y como a nuestra Teresita
lo cuidarás con amor
y llevándolo en tus alas,
en tu presencia Señor,
la santidad alcanzará
tu Siervo Reparador.

Su Amada, la Inmaculada
guarda su consagración
y amparo le ofecerá
en tiempos de turbación.

A su Amado el mirará
traspazado en la cruz,
de ella brotarán torrentes
y del Dulce Corazón
que abierto se entregò
para nuestra salvación.

La pequeña florecita
adornará su camino
regalándole rositas
a su querido hermanito.

Ella siempre lo ha mirado
y se acercó a su destino
cuando aún niño y enfermo
el gorrioncito sufrió
fuertes dolores y angustia.
¡ Su lecho ella acompañó!

Lo enamoró al leer su vida
y en intimidad con María
lo invitó a consagrase
a ofrecer toda su vida.

Hoy su trinos y suspiros
lo llevan a otra morada
y su pequeño servicio
de sacristán en su pueblo
se extenderá más allá
en su amado monasterio.

Vuela pequeño gorrión
y no mires nunca atrás,
te lo dice esta mariposa
que es dichosa cada vez más.

Se sencillo y transparente
como un hilo de agua clara
y no detendrán tu vuelo
tempestades y borrascas.

Y llelgarás hasta el fin
como el Discípulo Amado
pues el amor es más fuerte
que cualquier otro adversario.

Confía a los que dejas
al Corazón del Amado
pues su bondad es sin fin,
el cuidará de los tuyos.
No los abandonará;
tu entrega dará sus frutos
y ellos recogerán como
también lo hara el mundo.