Te levantas hacia el cielo
Como una recta de plata.
Pareces un juguetito
Para las estrellas blancas.
Pequeño cirio apagado
Que, como un dedo, señalas.
Pequeño cirio de cera
Vertical como una lanza.
Tus raíces son las flores,
Pequeñitas y escarlata,
Unas rosas de cristal
Nacidas de la mañana.
Tu dedo indica el camino
Por donde mi vida avanza,
Ese camino de monte
Que sube, sube y no baja.
Tú eres una limpia antorcha
Que iluminas apagada.
Tú eres una flecha de oro
Que en silencio piensa y habla.
Yo quiero encenderte, cirio,
Y regalarte una llama,
Una luz que no te queme
Ni destruya tu palabra.
Yo quiero escuchar tu canto,
Cirio erguido de mi casa.
Yo quiero ser vertical,
Como el árbol de una rama.
Yo quiero dar mi mensaje
Como tú, velita clara.
Alimentado de rosas,
Sin que el fuego me dehaga.