Invocación a San José, el esposo enamorado

Autor: Padre Pedrojosé Ynaraja

Libro: En torno a Adviento y Navidad

 

 

Contigo seremos breves, eres el gran protector que, en apariencia, siempre está ausente. Eres como un centinela escondido en la garita, pero que lo vigila y lo protege todo. Eres de aquellas personas que se hacen querer pero a las que uno teme siempre molestar. 

Esta noche se te ha encomendado a ti la protección de este acontecimiento, minúsculo, por el limitado espacio y tiempo que ocupa, pero enorme por su trascendencia, hoy ha de nacer en la Tierra el Hijo de Dios y a Él y a tu esposa, María, debes acompañar. Reconocemos que es grande tu responsabilidad y que eres fiel a lo que se te ha encomendado y, no obstante la importancia que tiene tu quehacer, nadie se acuerda de ti ahora. 

José, alguien dice que eras un poco taciturno, y hasta tímido quizás, pero no te faltó bondad, ni ternura, y de ella, tu esposa, también la recibiste. Acepta nuestro homenaje silencioso, que es como a ti te cae mejor, y sé ahora nuestro protector sin dejar nunca de velar discretamente por nosotros.