Financiamiento de campañas a favor del aborto

Autor: Martha Morales

 

 

Hay quieres matan a sangre fría y quieren que ese delito se convierta en un “derecho”, y quieren hacer pensar a los parlamentos del mundo que el aborto es un derecho de la mujer. El discapacitado, el enfermo terminal y el niño en el seno materno necesitan más protección que el resto de las personas.  

            GIRE (Grupo de Información sobre Reproducción Elegida), organización feminista que está a la cabeza del movimiento abortista en México, está recibiendo miles de dólares del extranjero en su batalla a favor de la muerte del no nacido de: Fundación Bergstrom, Buffet Foundation, Fundación Ford, General Services Foundation, The Global Fund for Women, Fundación Hewlett, Fundación Mac Arthuer, Fundación Packard, The Summit Foundation. Ahora el secretario de Salud está apurado tratando de cambiar el concepto de embarazo, ¿le llegaría un pedazo de “pastel” de estas instituciones?  

            GIRE y SIPAM, afirman que se dan un millón de abortos al año en nuestro país. Si eso fuera cierto, todas las mujeres del país tendríamos que haber abortado al menos una vez en la vida, ya que somos 45 millones de mexicanas, de las cuales, alrededor de la mitad están en edad de tener hijos. Pero de éstas, el 67% usa algún método anticonceptivo. Quedan alrededor de 8 millones de mujeres que pueden embarazarse. En cambio, la Sría. de Salud dio la cifra de cien muertes de madres al año por causa del aborto, con antelación.  

            Hay quien dice: “legal o ilegal las mujeres que quieran van a abortar”. Sí, es verdad, pero mucha gente confunde moralidad con legalidad y piensan que, si la ley lo permite, ya es moral. La ley no siempre va en armonía con la moral. Para que una ley se legitime, debe de ir en consonancia con la naturaleza. Despenalizar un crimen es darle carta de ciudadanía. Se ha demostrado que en lugares donde se ha legalizado, éste se ha disparado, ha aumentado estrepitosamente, como pasó en EE.UU. e Italia. En Estados Unidos se hacen 4 mil abortos al día. Uno de cada 4 embarazos termina en aborto  

            Es evidente que donde el aborto está legalizado, se usa más por razones de conveniencia social y como un método de control de la natalidad, que por motivos de salud.  

            Las feministas dan el argumento de que hay muchos abortos. ¡Hay más robos aún! ¿y por eso se va a legalizar el robo? No es la penalización del aborto lo que genera problemas de justicia social; mayores injusticias se darían con su liberalización. Estos problemas vienen de la ignorancia, de la miseria, del desempleo y, sobre todo, del libertinaje sexual.  

            La defensa del aborto se hace con la presentación de casos desgraciados que suscitan compasión. Haría falta una difusión masiva de cómo se realizan las prácticas abortivas para que vean lo que sufre el niño no nacido al ser descuartizado. Destrozar un feto es un acto depravado.  

            El aborto medio es el que se practica contra un hijo que nacería normal pero que ha sido fruto de una relación sexual libremente querida. Nadie está obligado a hacer el acto sexual, si se elige, se hace libremente, por tanto, se debe de cargar con la responsabilidad de la elección.  

            Hace 50 años nadie podría imaginar que se podría equiparar al aborto con un derecho humano. Antes se hablaba de salud materno-infantil, ahora de salud reproductiva, ¿Por qué el cambio? porque salud reproductiva incluye el aborto a petición. Se trata de disfrazar las palabras con ropajes de bondad.  

            Los adictos a la planificación familiar y a la educación sexual temprana están formando expertos en técnicas sexuales pero analfabetas en el dominio de sí mismos. Se le dice a la juventud que se tome el sexo como un juego, y luego se asombran de que se cosechen embarazos no deseados, como si el sexo no tuviera nada que ver con los embarazos.  

            Si la sociedad moderna retrocede ante la pena de muerte, ¿cómo admitir la eliminación del pequeño inocente cuyo único delito es nacer a destiempo? Además, muchos embarazos no deseados terminan siendo deseados.  

            Varios personajes contemporáneos hablan de América Latina como la esperanza de la humanidad. México: ¿cómo vas a responder?...Un país que mata a sus hijos pierde toda esperanza. No puede privarse de la vida a un inocente ni siquiera para salvar a toda la humanidad: cada persona es el centro del universo, pero no sólo yo, sino cada persona.  

Un embarazo no planeado no se convierte, automáticamente, en un niño no deseado.