Flores dentro de perlas

Autor: María Velázquez Dorantes

 

El rosario de María es el secreto mismo del silencio de la Virgen, la portadora de todos los íntimos pensamientos de la humanidad; es un regalo de flores piadosas dentro de las perlas que lo forman. 

En cada una de las perlas que unifican la oración, se envía un mensaje mundial, alguna de ellas está destinada a la paz, una más por la unión familiar, otra pide por los niños víctimas del aborto, además de rogar por sus padres y por el médico que lo ocasionó; así es está cadena envuelta en hermosura. 

Son flores de fino cristal, de grandes pétalos, de aroma exquisito, que le colocan a sus pies de María los grandes sucesos de la vida. 

Es una de las piedritas que sostienen la fe de la Iglesia Católica, la fe de laico, y que se ven envueltos por la forma aperlada, siendo que en el fondo conllevan la piedad, la esperanza y la bondad de nuestra intercesora ante Cristo su hijo, y Dios Padre. 

Por cada mensaje, quizás enviemos una sonrisa a nuestra madre, una plegaria, una suplica, un momento con ella. 

Esto es un rosario, las flores que ofrecemos en un día normal, o en uno angustiante, por un acto de fe que nos da la fortaleza de saber que alguien nos está escuchando e interviniendo por nosotros. 

Una flor guardada en una perla para María es un Ave Maria.