Amistad

Autor: María Velázquez Dorantes 

 

 

                                           La amistad es más difícil y más rara que el amor. Por eso, hay que salvarla como sea.
                                           Alberto Moravia (1907-1990) 
                                           Alberto Pincherle. Escritor italiano.

A lo largo de la historia del hombre ha creado una tipificación de lo que significa el producto de una interacción con las personas, es decir, la amistad que surge en un momento y que se vuelve en algo de lo más bello en la existencia. Sin embargo, que ha pasado en está actualidad que se considera "moderna", cómo es que concibe el producto de la amistad. Cuando lo que se observa es que los amigos se traicionan, se burlan, se tienen envidia.

No es la regla general para todos, pero esas características negativas en la amistad se ven a mayor grado, que aquellas como la confianza, el respeto, la hermandad -que difícilmente se encuentran con una lupa-, el caleidoscopio de la amistad requiere para los tiempos de hoy una mayor profundización en los valores y también una jerarquización de estos. El egoísmo fruto del individualismo no siembra la amistad y mucho menos la conserva, todos los seres humanos tienen la necesidad de buscar y ser amigos, no obstante el utilitarismo de las personas ha sesgado esa necesidad. Porque hoy, en día, eres amigo y eres útil por comodidad y temporalidad.

La amistad ya no se observa como algo duradero, que se fortalece con la verdad, la honestidad, la mano que brinda apoyo; lamentablemente los hombres ya no se tienen confianza, ni si quiera en sí mismos. No falta quien en un negocio lleve el compañerismo solo a que este le acarree beneficios a uno, o el supuesto "amigo" que le interesa la novia del otro y esta sale con él. Porque también en el trabajo y en el noviazgo es justamente donde se aprende a ser amigos.

¿Acaso existirá una crisis que busque destrozar la amistad de los unos con los otros, para esparcir el interés y lo útil de una persona a medida que está brinde confort y emociones estaciónales? Es posible pensar que la amistad solo es un momento de conversación agradable en una fiesta, o que la amistad se ha convertido en la falsa premisa de "contigo puedo y quiero hacer lo que se me antoje". Si esto resulta más certero, y la balanza de la amistad se inclina hacia ese lado ¿qué especie de humanos somos?, si el hombre no es capaz de ofrecer caridad y amor al otro, si no le puedes confiar, aconsejar, apoyar y sostener en momentos críticos y no críticos, qué hemos hecho de la humanidad.

Tarde o temprano se busca una mano amiga, pero si sólo se ha recibido engaño y maldad quién podrá estrecharnos la mano; deberíamos de caminar hacia la perfección, hacia la escucha del otro, y no retroceder como cangrejos creyendo que en la vida no se necesita de nadie, no se puede ir cavando el destino de la soledad que nos convertirá en seres frustrados y amargados, solo porque no he permitido que la amistad siembre el don del servir a los demás.