Un renacimiento invisible

Autor: María Velázquez Dorantes

 

 

            La palabra renacimiento llega al inglés en 1845, dentro del margen de los siglos XV y XVI, sin embargo hoy estamos viviendo un renacimiento a través, de una serie de acciones que nos han venido convulsionando; estamos implicados en un calidoscopio de  reesdecubrimientos, por ejemplo el arte medieval ha regresado como nunca antes, las formas más antiguas de religión están creciendo, la superstición ha recobrado un papel más en la historia.  

La identidad privada es considerada como un riesgo, existe un gran número de tribus como las raperas, las hip hop y en nuestro momento, la cultura occidental ha llegado a una audiencia masiva, se ha revolucionado todas las artes pictóricas, ahora todos los tiempos son válidos. Actualmente disfrutamos de viejos programas de televisión y vivimos a la velocidad de la luz, el conocimiento no existe fuera de la norma. Hoy el conocimiento tiene que dramatizarse, con un misticismo donde los antiguos o viejos, hacían este tipo de cosas.  

Estamos en el centro de un gran renacimiento, la tecnología, la prensa, la construcción de barcos con enormes herramientas de tecnología siguen evolucionado, el hecho de que este renacimiento  hoy sea retomado como el nuevo renacimiento retórico es porque, durante miles de años el occidente ha experimentado nuevos renacimientos. ¿Habrá otros renacimientos? Si giramos la rueda y vemos hacia atrás veremos el renacimiento Carolingio, el medioevo  se hizo dueño de Europa  en el siglo VIII, se llevó el liderazgo de las Iglesias, las artes recibieron otro nuevo impulso, hay un nacimiento de las cosas reales. Y si la rueda se vuelve a girar, más atrás, en el siglo IV aparece una gran figura San agustín, vemos como  se establece el cristianismo como el cimiento de la cultura occidental. La fusión del césar y el Papa en el año 330, además se observa la fundación de Constantinopla, se construyen las bibliotecas, se llenan las calles con tesoros y arte. ¿Dónde se inicia este nuevo ciclo? Nadie sabe, porque hay renacimientos que levantan las artes, levantan un período moral y establecen reformas morales.  

Si continuamos girando esta rueda veremos como en el siglo IV y V antes de Cristo, se encontraba Alejandro, la Atenas Clásica , Platón y Aristóteles y más atrás un período Homérico; en el siglo XII antes de Cristo se había establecido la era de oro, el periodo Troyano, pero que tal, en el siglo XVI antes de Cristo, antes de la invención del alfabeto, había sistemas de escritura muy fuertes, se organizaba y reformaba el conocimiento nuevamente y se trataba de controlar el tiempo.  

Conjuntando eventos, involucrando mucha adivinanza porque no hay certeza nos vamos a dar cuenta que en occidente no hay ya renacimiento, los renacimientos que están surgiendo tienen una característica en común: resultan de una acción previa. Es el cierre de una cultura, es una onda de choque producida por esa tecnología en la que estamos inmersos. ¿Qué percepción se integra a este evento? El precipitador de la tecnología. La evolución humana se alejó de la biología y se abocó a la tecnología.  

El renacimiento invisible, que está alrededor de todos nosotros es acelerado por esta tecnología, hemos vivido una explosión en un espacio sideral, el planeta se ha vuelto una forma de arte, se ha tomado en cuenta la tecnología, el renacimiento del siglo XXI ha reunido todos los renacimientos. El entorno ahora nos aboca a la Internet , la enciclopedia tribal de Grecia necesita a un nuevo Homero para construirla con coherencia, en este renacimiento caótico.

El gran renacimiento involucra toda la matriz cultural, estas explosiones culturales, antes eran hacia a fuera hoy en nuestro renacimiento se vive de forma inclusiva y se da por la electricidad. La idea de la reencarnación y de la experiencia cíclica que se ha tomado está basada en la línea de la historia, por lo tanto, nos hacen vivir en una post-historia y para la historia yace un futuro, este nace en las manos de los poetas y los artistas.  

Los renacimientos generalmente son invisibles para la gente que participa en ellos, un renacimiento es un ejercicio colateral y esa cosa que lo hace renacimiento es la tecnología; un renacimiento está acompañado por una revolución, por una guerra muy drástica  que nos llevan a una revolución de una identidad. Hoy vivimos <guerras> y son guerras terroristas.

Estos renacimientos de los que se ha hablado han existido en un período de intervalos de cuatro siglos, es importante preguntarnos si sólo la cultura occidental avanza así, es decir, cuatro siglos, por ello es necesario preguntarnos de los patrones de China o de Egipto. Todos estos asuntos piden una respuesta porque la tecnología nos esta ofreciendo solo cuatro formas de expresión, la primera es que acrecienta lo que está allí, segundo trae de nuevo a la vida un proceso viejo, tercero es que tiene un mosaico complejo de efectos colaterales y por último un uso de la tecnología pero es la situación más antigua.  

Estamos llegando a un tiempo donde la imprenta, el alfabeto ya no están a cargo, no hay nada inherente a la nueva tecnología, el alfabeto ya no es la tecnología predominante.  

El renacimiento ocurre en el siglo XV y XVI, pero también es cierto que en el siglo XVIII se trabajaba en que habían sucedido dos siglos antes. Y en este renacimiento no se ve un declive.  

Es importante aclarar, que el renacimiento no genera la guerra, la tecnología genera cambios de pensamiento y sensibilidad. La violencia siempre tiene el efecto de estabilizar una identidad, la cultura violenta es una cultura en transición pero siempre será una cultura débil.  

En el caso de Iraq, su situación es de reinventarse así mismo, esta revocada a redescubrir su cultura, existe una búsqueda de identidad. El programa actual de Iraq va a fracasar, la mayoría de oposición viene de los grupos tribales, pero eso es imponerse a una violencia social; es importante saber que sin el alfabeto la imposición en Iraq va a fracasar. Nuestro lenguaje tiene todo un compendio de experiencia.  

Nunca en nuestra historia nos hemos hecho responsables de los efectos de la tecnología, no se puede dejar el futuro en manos de gente que solo quiere vender drogas y productos como nuevas mercancías. Vivimos en un desequilibrio perpetuo, la Internet ha revolucionado todo, no podemos dejar nuestro futuro en manos de productores que no se hacen responsables.  

(Conferencia de Eric M. McLuhan en la V Bienal Iberoamericana de la Comunicación)