Reflexión espiritual
”Venid, benditos de mi Padre” 

Autor: Padre Mariano de Blas, L.C.

Libro: Hacia las cumbres           

                     

‘Venid, benditos de mí Padre, a tomar posesión del Reino de los Cielos’. Las palabras más bellas que pueda Dios decir a una criatura son ésas: ‘Venid’: la invitación personal a acercarnos sin temor; venid a mi mesa, venid a mi huerto, entrad en mi amistad.  

          “Benditos de mí Padre”: Tener la bendición de Dios en la vida es la máxima seguridad, porque esa bendición transforma tu vida entera en una amorosa felicidad.  

          “A tomar posesión del Reino de los Cielos”: Te daré la mitad de mi Reino, te doy mi Reino, se nos dice aquí; el Reino de Dios, ¡qué grande es, qué hermoso es, qué tuyo es! Aquí tienes la llave, pequeño príncipe del gran Reino.   Te sonaba muy exigente el precio, porque te hablaban de cruz y renuncia, y ahora que eres dueño del castillo, ¿qué opinas?   ¿Barato, muy caro, inefable?   ‘Juego de niños’, dijo uno del precio, cuando se lo mostraron, aunque lo maltrataron como a un mártir, y apostó por ese Reino; nadie se lo pudo arrebatar.  

          ¿Por qué luchas en la vida?   ¿Por qué te matas y trabajas y oras? ¡Qué rico eres y qué rico vas a ser, cuando te entreguen las llaves de un Reino eterno!   Tienes que saber esperar y luchar y morir por ese Reino.