Quiero Vivir, pensamientos de vida

Voy a las cumbres

Autor: Padre Mariano de Blas, L.C.




Tuve que florecer como cactus
en las arenas y en las dunas
y hacer amistad con las montañas rocosas, 
sin árbol ni mata en sus laderas.
Algún que otro pino cobijó a su sombra 
mis sueños de peregrino.
Amigo como he sido siempre 
de las cumbres,
a las cumbres voy y en las cumbres me quedo,
para ver a Dios, si se puede,
un poco más de cerca.
Cuando bajo de la cima al valle
siento nostalgia de la montaña.
Desde la cumbre se ve el cielo más cerca
y se olvidan los cuidados de la ciudad. 

Siempre que he subido a una montaña
he disfrutado hondamente los paisajes,
el río y el valle, los árboles de la altura;
he dejado a mi alma volar y soñar en el cielo,
en los grandes ideales,
en la persona de Jesús
que también era amigo de las montañas,
de las montañas que Él mismo creó
al principio de los siglos.