Reflexión espiritual

Perseverancia

Autor: Padre Mariano de Blas, L.C.

Libro: Hacia las cumbres

 

Perseverar es un arte difícil pero necesario para lograr las metas.   Los inicios de una empresa suelen aureolearse de ilusión, decisión y creencia de que será fácil llegar.   Pero, apenas se han dado los primeros pasos, hacen acto de presencia los enemigos de toda perseverancia:  desencanto, cansancio, temor de no concluir.   Aquí termina todo el entusiasmo de muchos.

           Algunos siguen impertérritos la tarea, reciclan el entusiasmo, se arman de coraje y siguen adelante; pero nuevamente amenazan con su maléfica presencia los mismos y otros enemigos: la rutina, el cansancio mayor, la risa de los vecinos y una voz interior que gimotea: ‘No llegarás’. Algunos incautos son atrapados por estos fantasmas, y desisten para su mal.

          Unos cuantos, ya menos, siguen en pie, redoblan esfuerzos, arrancan entusiasmo y fe no sé de dónde, y prosiguen victoriosos.   Son los que llegan; los que querían llegar a pesar de todos los obstáculos; los que no lloran cuando arrecian el calor o la tormenta; los que paladean el amargo sabor del cansancio, la rutina y el miedo, pero no se doblan, siguen prendidos de su estrella, reafirman el deseo de llegar, y llegan al fin.