Evangelio - Historia y Reflexión...
Bienaventurados,
Lucas 11,27-28
Autor:
Padre Marcelo Rivas Sánchez
Web
del Padre
“Cuando Él hablaba así, una mujer levantando la voz de entre la multitud, dijo: "¡Feliz el seno que te llevó y los pechos que te amamantaron" Y Él contestó: "¡Felices más bien los que escuchan la palabra de Dios y la conservan!"
Bienaventurados…
- Los
humildes que se gozan en las cosas de Dios.
- Los
que saben dar un piropo a
la Virgen
María.
- Pero
aún más los que oyen la palabra y la cumplen.
Cuando
habla Dios
Un
hombre susurró: "Dios, habla conmigo". Y un ruiseñor comenzó a
cantar. Pero el hombre no oyó.
Entonces
el hombre repitió: "Dios, habla conmigo". Y el eco de un trueno se oyó.
Mas el hombre fue incapaz de oír.
El
hombre miró a su alrededor y dijo: "Dios, déjame verte" Y una
estrella brilló en el cielo. Pero el hombre no la vio.
El
hombre comenzó a gritar: "Dios, muéstrame un milagro" Y un niño
nació. Mas el hombre no sintió el latir de la vida.
Entonces
el hombre comenzó a llorar y a desesperarse: "Dios, tócame y déjame
saber que estás aquí conmigo..." Y una mariposa se posó suavemente en su
hombro. El hombre espantó la mariposa con la mano y desilusionado continuó su
camino, triste, solo y con miedo.
Todos en
la Palabra
de Dios
- Para
saber de la presencia de Dios. Estaré con ustedes hasta el final.
- No
hace falta sufrir para comprender que Dios está.
- Para
mantener los ojos abiertos a los milagros de Dios en el cada día.
María
la Virgen
nos enseña que…
- En
la visita a la prima Isabel. Dichosa porque has creído. Pues todo se
cumplirá. María se siente aludida y por eso responde desde San Joaquín y
Santa Ana. Hágase en mí según tu palabra. Respuesta llena de fe en el Señor
que no defrauda, incluso desde la misma cruz.
- María
en esa fe continúa el camino y lo hace como la primera cristiana. La
primera y la más perfecta discípula de Cristo.
- María
se constituye en pauta de
la Iglesia
en la fe, la caridad y en esa unión perfecta con
Cristo.
- Todo
porque practicó y escuchó la palabra.
ESPECIALMENTE PARA TI
Hace
tiempo que camino contigo y te acompaño siempre y no te das cuenta.
Cuando
tienes problemas los hago míos y te ayudo, pero a otros les das las gracias.
Si
estás triste, al verte así me entristezco y te consuelo, pero tú ni te fijas.
Cuando
estás alegre, me alegro contigo y quisiera que supieras que estoy a tu lado
A
veces dices: "no tengo un amigo", y me duele saber que nunca me has
buscado.
¿Nunca
has tenido la oportunidad de conocerme? Pero muchos son los que hablan de mí, y
los que me han conocido se alegran cada día al recordar ese momento.
Me
alegro de estar con ellos. En la esquina hablan de mí, en los templos hablan de
mí.
¿Quisieras
abrirme las puertas de tu corazón, encontrarte conmigo y aceptarme como TU
AMIGO? Con amor, Jesucristo.