Evangelio - Historia y Reflexión...

No se preocupen de lo que van a decir Lucas 12,8-12

Autor: Padre Marcelo Rivas Sánchez 

Web del Padre

 

 

Santa María en sábado

Señor, concede a tus hijos gozar siempre de completa salud de alma y cuero; y por la intercesión de la gloriosa siempre Virgen María, líbranos de las tristezas de esta vida y concédenos disfrutar de las alegrías eternas. Por nuestro Señor Jesucristo.

Efesios 1,15-23  Dios a Cristo como cabeza a la Iglesia

Salmo responsorial  8 Qué admirable, Señor, es tu poder

Lucas 12,8-12  No se preocupen de lo que van a decir “En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Yo les aseguro que a todo aquel que me reconozca abiertamente ante los hombres, lo reconocerá abiertamente el Hijo del hombre ante los ángeles de Dios; pero a aquel que me niegue ante los hombres, yo le negaré ante los ángeles de Dios. A todo aquel que diga una palabra contra el Hijo del hombre, se le perdonará; pero a aquel que blasfeme contra el Espíritu Santo, no se le perdonará. Cuando los lleven a las sinagogas y ante los jueces y autoridades, no se preocupen de cómo se van a defender o qué van a decir, porque el Espíritu Santo les enseñará en aquel momento lo que convenga decir”

Con Dios, pero de verdad

Reconocer a Dios

Estaba un día un hombre parado en la esquina de una calle y riendo como un loco. ¿De que te ríes?  le preguntó un transeúnte ¿Ves esa piedra que está ahí en medio de la calle?, desde que llegué aquí esta mañana, diez personas han tropezado en ella y han maldecido, pero ninguna de ellas se ha tomado la molestia de retirarla para que no tropezaran otros".


Lo mejor que podemos hacer para mejorar el mundo, es procurar que la vida de los demás sea mejor cada día, esto se logra haciendo que otros no caigan en los mismos errores en que nosotros hemos caído, pues si otros se hubieran preocupado antes, tal vez nosotros no hubiéramos cometido muchos errores.

Muchos lo niegan

·         No solo de palabras, sino con la vida que oprime, daña y mata.

·         Cristianos de simples actos religiosos.

·         Cristianos que jamás actúan con forme a la voluntad de Dios.

·         Apoyándose en el miedo y las apariencias.

“Se perdona todo, pero contra el Espíritu santo no se le perdonará”

Un cristiano estaba caminando por la calle cuando se encontró con el dueño de una compañía que fabricaba jabones. Mientras hablaban, el fabricante de jabones dijo: «El evangelio que usted predica no puede ser muy bueno, porque todavía hay mucha gente mala. El cristiano notó que había un niño cerca jugando con lodo. El niño estaba
manchado de lodo de pies a cabeza. El cristiano dijo a su amigo: Su jabón no puede ser muy bueno, porque todavía hay mucho sucio en el mundo. El hombre respondió: Bueno, solamente limpia cuando una persona lo usa. Exactamente, dijo el cristiano.

 

¿Cuál es ese pecado contra el Espíritu Santo?

No te detengas

 

Pautas para retener la felicidad

La vida es demasiado corta para que nos dejemos arruinar por la depresión y el desánimo

  1. Basta a cada día su afán. Si a la carga del presente le sumamos los problemas del pasado y del futuro, lo que vamos a cosechar es un sentimiento de ansiedad y de impotencia ante la vida. En la medida de lo posible, concentrémonos únicamente en las necesidades del día.
  2. Aprovechar lo que ya tenemos. En lugar de estar siempre ansioso por tener más dinero, más amigos, más autoridad, más cosas o más prestigio, analicemos lo que ya tenemos para ver si lo estamos utilizando a plenitud. Busquemos la manera de mejorar las circunstancias y las relaciones personales.
  3. El sentido del humor. Siempre tendremos problemas en la vida, mas no todos serán tragedias. Viéndolo bien, muchas de nuestras dificultades tienen un aspecto humorístico que podemos utilizar en nuestras anécdotas para ayudarles a otros a aprender lecciones.
  4. Establecer un orden de prioridades. Es importante que dediquemos tiempo a Dios, a la familia, a nosotros mismos y a la diversión. Si organizamos estas actividades, no nos sentiremos culpables de no estar trabajando en todo momento.
  5. Hacer un cambio y perseverar en él. Asumamos el control de nuestra vida. Establezcamos un programa para hacer ejercicio, para perder peso, para dejar de fumar... y perseveremos en él. Cuando uno logra vencer un mal hábito, le da un impulso positivo a la vida.
  6. Perdonar y olvidar. No sigamos rumiando los errores del pasado. No revivamos frustraciones. Dejemos que el ayer se trague sus tristezas. Los pensamientos negativos sobre la falta de aprecio del jefe, de los compañeros de trabajo, del cónyuge o de la familia apagan los sentimientos optimistas que podamos tener.
  7. Estar conscientes de las bendiciones. Cuando me despierto por la mañana, avivo el pensamiento con este versículo de las Escrituras: "Este es el día que hizo el Eterno; nos gozaremos y alegraremos en él" (Salmo 118:24).

 

Oración después de la comunión

Señor, al recibir el sacramento celestial en esta festividad de la santísima Virgen María, te pedimos que nos concedas celebrar dignamente, a imitación suya, el misterio de nuestra redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.