Evangelio - Historia y Reflexión...

Vende lo que tienes y sígueme Marcos 10,17-30

Autor: Padre Marcelo Rivas Sánchez 

Web del Padre

 

 

Ordinario Te pedimos, Señor, que tu gracia nos inspire y acompañe siempre, para que podamos descubrirte en todos y amarte y servirte en cada uno. Por nuestro Señor Jesucristo…

 Sabiduría 7,7-11 Mejor sabiduría que riqueza.

Salmo 89  Sácianos, Señor, de tu misericordia.

Hebreos 4,12-13 La palabra es viva y eficaz

Marcos 10,17-30 Vende lo que tienes y síguemeEn aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó corriendo un hombre, se arrodilló ante él y le preguntó: Maestro bueno, ¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna? Jesús le contestó: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno sino sólo Dios. Ya sabes los mandamientos: No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, no cometerás fraudes, honrarás a tu padre y a tu madre. Entonces él le contestó: Maestro, todo eso lo he cumplido desde muy joven. Jesús lo miró con amor y le dijo: Sólo una cosa te falta: Ve y vende lo que tienes, da el dinero a los pobres y así tendrás un tesoro en los cielos. Después, ven y sígueme. Pero al oír estas palabras, el hombre se entristeció y se fue apesadumbrado, porque tenía muchos bienes. Jesús, mirando a su alrededor, dijo entonces a sus discípulos: Qué difícil les va a ser a los ricos entrar en el Reino de Dios. Los discípulos quedaron sorprendidos ante estas palabras; pero Jesús insistió: Hijitos, qué difícil es para los que confían en las riquezas, entrar en el Reino de Dios. Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el Reino de Dios. Ellos se asombraron todavía más y comentaban entre sí: Entonces, ¿quién puede salvarse? Jesús, mirándolos fijamente, les dijo: Es imposible para los hombres, mas no para Dios. Para Dios todo es posible. Entonces Pedro le dijo a Jesús: Señor, ya ves que nosotros lo hemos dejado todo para seguirte. Jesús le respondió: Yo les aseguro: Nadie que haya dejado casa, o hermanos o hermanas, o padre o madre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio, dejará de recibir, en esta vida, el ciento por uno en casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y tierras, junto con persecuciones, y en el otro mundo, la vida eterna”

Sabiduría

El evangelio nos presenta a un hombre que salió a encontrarse con el Maestro del Camino, con el fin de pedirle una clave para alcanzar la vida eterna.

“¿Cómo poseer la vida eterna?”

  1. Fue remitirlo a la bondad de Dios.
  2.  Luego lo remitió a los mandamientos. no ser injusto
  3. Desde Jesús el primer paso para encontrar a Dios es encontrar al hermano.
  4. Se suponía que la clave para una vida eterna, sabia y feliz, era la Torá. No bastaba con cumplir los mandamientos.

“Sólo te hace falta una cosa: vete a vender todo lo que tienes y dale el dinero a los pobres; así tendrás un tesoro en el cielo”

Mucho cuidado

Mantengamos la base que es…

«Todo es posible para quien tiene dinero»

La avaricia…

·         Es fuente de infidelidad. Por dinero se vende todo.

·         Una persona avara es infeliz.

·         Sin afecto viendo a los demás como obstáculos.

·         En todos hay codicia, deseos de poder, afán de riqueza.

No es quedarse en la calle por los otros

·         No es cortarse las manos, sacarse un ojo…

·         A nadie se le ocurriría odiar a padre y madre.

·         Son condiciones de seguimiento, es decir, purificarse.

·         Pero la propuesta de Jesús no fue ni un consejo, ni menos para una élite especial, sino para todo aquel que quisiera seguirlo.

·         No es un llamado a multiplicar la pobreza ni a sumarnos a las masas de indigentes.

·         No es un llamado a derrochar irresponsablemente todo lo que se adquiere, ni a dar a todo el que pide sabiendo que hay personas que se aprovechan de la generosidad de la gente.

·         No es una exaltación de la miseria ni de la carencia de bienes como un valor. 

·         Es una invitación a optar por una forma de vida que no esté dominada por el dinero, sino por Dios.

Donde reinan el dinero y la riqueza, reinan la inhumanidad y la injusticia.

No basta con ser buenos

La llamada al seguimiento de Cristo está dirigida a:

Dios quiere que todos se salven

“Para los hombres esto es imposible pero no para Dios, porque para Dios todo esto es posible”

Muchos huyen…

“¡Qué difícil va a ser que los que tienen la riqueza entren al Reino de Dios!” 

Oración después de la comunión

Te pedimos, Señor, humildemente, que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, que hemos recibido en alimento, nos comunique su misma vida.