Evangelio - Historia y Reflexión...

La ofrenda de la viuda Marcos 12,38-44

Autor: Padre Marcelo Rivas Sánchez 

Web del Padre

 

 

Santa María en el sábado Perdona, Señor, los pecados de tus hijos, y ya que no podemos agradarte debidamente con nuestras acciones, sálvanos por la intercesión de la Madre de tu Hijo, Jesucristo, Señor nuestro, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.

2 Timoteo 4,1-8: Cumplir la tarea del evangelizador

Salmo responsorial 70 Mi boca, Señor, anunciará siempre tu salvación

Marcos 12,38-44 La ofrenda de la viuda.En aquel tiempo, enseñaba Jesús a la multitud y le decía: “¡Cuidado con los escribas! Les encanta pasearse con amplios ropajes y recibir reverencias en las calles; buscan los asientos de honor en las sinagogas y los primeros puestos en los banquetes; se echan sobre los bienes de las viudas haciendo ostentación de largos rezos. Estos recibirán un castigo muy riguroso”. En una ocasión Jesús estaba sentado frente a las alcancías del templo, mirando cómo la gente echaba allí sus monedas. Muchos ricos daban en abundancia. En esto, se acercó una viuda pobre y echó dos moneditas de muy poco valor. Llamando entonces a sus discípulos, Jesús les dijo: “Yo les aseguro que esa pobre viuda ha echado en la alcancía más que todos. Porque los demás han echado de lo que les sobraba; pero ésta, en su pobreza ha echado todo lo que tenía para vivir”

Una religiosidad nueva

Una viuda con tan poco y dando todo

Dios conoce ele corazón, ya que lo lee.

Dos reales

 

Generosidad y punto

·         Nunca damos de lo que necesitamos para vivir.

·         Siempre danos lo que nos sobra.

·         Damos lo poquito. Jamás lo mejor.

·         Seremos juzgados en lo que nos reservamos.

·         Nos contentamos con dar lo que nos sobra.

·         Hay que darnos nosotros mismos: calor y acogida, compañía y tiempo, alegría y consejo…

Jesús quiere…

·         Denunciar que la religiosidad mentirosa aporta limosnas.

·         Que la dar hay que guardar silencio y no tocar platillos.

·         Un corazón despojado de todo poder.

Dar es…

 

 

Madre Teresa dijo (y vivió, por supuesto) que hay que “amar hasta que nos duela”

 

Ser generoso es: La disposición natural e incondicional que tiene para ayudar y servir a los demás sin hacer distinciones.


Ser generoso es algo que muchas veces requiere un esfuerzo extraordinario.

Procura sonreír siempre.

Haz el propósito de tener un detalle de generosidad diariamente con diferentes personas (familia, trabajo, escuela, club...)

Aprende a ceder la palabra

Cumple con tus obligaciones a pesar del cansancio y siempre con optimismo,

Atiende a toda persona que busca tu consejo o apoyo.

No olvides ser sencillo.

La clave está en enseñarnos a dar siempre algo a los otros.

Toma hoy la decisión de dar siempre algo a cada persona que te encuentres y tu vida se llenará de amor y de alegría.

No se trata de dar cosas sino de regalar tiempo, una sonrisa, un abrazo, una flor, una tarjeta, un estímulo, una oración.

Hay más alegría en dar que en recibir.

Oración después de la comunión

Señor, al recibir el sacramento celestial en esta festividad (Conmemoración) de la Santísima Virgen María, te pedimos que nos concedas celebrar dignamente, a imitación suya, el misterio de nuestra redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.