Evangelio - Historia y Reflexión...

Yo soy la vid verdadera Juan 15,1-8

Autor: Padre Marcelo Rivas Sánchez 

Web del Padre

 

 

San Pascual Bailón.  Dios nuestro misericordioso, que salvas al pecador y lo llamas a tu amistad, atrae hacia ti el corazón de tus hijos, libres ya de las tinieblas por el don de la fe, y no permitas que se aparten de ti, que eres la luz verdadera. Por nuestro Señor Jesucristo.

Hechos1-6 Asamblea de Jerusalén

Salmo responsorial 121  Vamos con alegría al encuentro del Señor. Aleluya.

Jn 15,1-8  Yo soy la vid verdadera “En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Yo soy la verdadera vid y mi Padre es el viñador. Al sarmiento que no da fruto en mí, él lo arranca, y al que da fruto lo poda para que dé más fruto. Ustedes ya están purificados por las palabras que les he dicho. Permanezcan en mí y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante, porque sin mí nada pueden hacer. Al que no permanece en mí se le echa fuera, como al sarmiento, y se seca; luego lo recogen, lo arrojan al fuego y arde. Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se les concederá. La gloria de mi Padre consiste en que den mucho fruto y se manifiesten así como discípulos míos”

San pascual Bailón…

Le pusieron por nombre Pascual, por haber nacido el día de Pascua (del año 1540). Nació en Torre Hermosa, Aragón, España. Es el patrono de los Congresos Eucarísticos y de la Adoración Nocturna. Pastor de ovejas. A los 24 años pidió ser admitido como hermano religioso entre los franciscanos. Como religioso franciscano sus oficios fueron siempre los más humildes: portero, cocinero, mandadero, barrendero. Pero su gran especialidad fue siempre un amor inmenso a Jesús en la Santa Hostia, en la Eucaristía. Durante el día, cualquier rato que tuviera libre lo empleaba para estarse en la capilla, de rodillas con los brazos en cruz adorando a Jesús Sacramentado. Siempre estaba alegre, pero nunca se sentía tan contento como cuando ayudaba a Misa o cuando podía estarse un rato orando ante el Sagrario del altar. Murió en la fiesta de Pentecostés de 1592, el 17 de mayo. El Papa lo declaró santo en 1690. El Sumo Pontífice nombró a San Pascual Bailón Patrono de los Congresos Eucarísticos y de la Adoración Nocturna.

Querido San Pascual: consíguenos del buen Dios un inmenso amor por la Sagrada Eucaristía, un fervor muy grande en nuestras frecuentes visitas al Santísimo y una grande estimación por la Santa Misa.

La uva y los sarmientos

Yo soy la vid verdadera, mi Padre es el labrador.

Renovémonos con Jesús

 

Solos jamás daremos frutos…

"Que amen a Cristo, que amen a Cristo, porque sin él nada podemos hacer"

Dios nunca se deja ganar en generosidad

·         Pues no sabe medirse al amar.

·         Se da totalmente

·         Pues su amor no tiene límites.

Permanecemos en él, es decir, vivimos el cielo por adelantado.

Amando es como conocemos a Dios

·         Daremos frutos si amamos.

·         Si amamos pediremos lo que nos de gana.

·         Pues amar es cumplir los mandamientos

·         Amar es más que dar. Es ser de Dios en todo y para todo.

 

 

Oración después de la comunión

Que el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, precio de nuestra redención, nos ayuden, Señor, a cumplir tus mandamientos y a obtener, así, nuestra felicidad eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.

 

¿A ti quien te condena?

Dos hombres fueron condenados. La sentencia consistía en que en un día determinado, en veinte años, serían torturados lentamente hasta la muerte.

Al escuchar la sentencia, el más joven se retorció de la pena y del dolor, y a partir de ese día, cayó en una profunda depresión.¿Para qué vivir?" se preguntaba,  ¿Para qué me esfuerzo?

El otro hombre, al escuchar la sentencia, se asustó y se impresionó, sin embargo a los pocos días resolvió que, como sus días estaban contados, los disfrutaría.

 No voy a anticipar el dolor y el miedo empezando a sufrir desde ahora.

 Voy a agradecer con intensidad cada día que me quede.

Y, en vez de alejarse de los demás, decidió acercarse y disfrutar a los suyos, para sembrar en ellos lo mejor de sí.

Cuando alguien le mencionaba su condena, respondía en broma:

Ellos me condenaron, yo no me voy a condenar sufriendo anticipadamente y, por ahora, estoy vivo.

Fue así que, paulatinamente, se convirtió en un hombre sabio y sencillo, conocido por su alegría y su espíritu de servicio.

Tanto, que mucho antes de los veinte años, le fue perdonada su condena.