Evangelio - Historia y Reflexión...
No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores
Marcos 2, 13-17
Autor:
Padre Marcelo Rivas Sánchez
Web
del Padre
Señor nuestro, que prometiste venir y hacer tu
morada en los corazones rectos y sinceros, concédenos la rectitud y sinceridad
de vida que nos hagan dignos de esa presencia tuya. Por nuestro Señor
Jesucristo… Amén.
1 Este es Saúl, el hombre
que gobernará a mi pueblo 1 Samuel
9, 1-4. 10. 17-19; 10,
2 Sal 20, 2-3.4-5 De tu
poder, Señor, se alegra el rey.
3 No he venido a llamar a los justos, sino a los
pecadores Marcos 2, 13-17 “En aquel
tiempo, Jesús salió de nuevo a caminar por la orilla del lago; toda la
muchedumbre lo seguía y él les hablaba. Al pasar, vio a Leví (Mateo), el hijo de
ALfeo, sentado en el banco de los impuestos, y le dijo: «Sígueme».
El se levantó y lo siguió. Mientras Jesús estaba a la mesa en casa de
Leví, muchos publicanos y pecadores se sentaron a la mesa junto con Jesús y sus
discípulos, porque era muchos los que seguían a Jesús. Entonces unos escribas de
la secta de los fariseos, viéndolo comer con los pecadores y publicanos,
preguntaron a sus discípulos: ¿Por qué su maestro como y bebe en compañía de
publicanos y pecadores? Habiendo oído esto, Jesús les dijo: No son los sanos los
que tienen necesidad del médico, sino los enfermos. Yo no he venido para llamar
a los justos, sino a los pecadores”
Hay ciertas personas como publicanos…
- Ayer era porque
perdonaba pecados.
- Hoy porque se contamina
con los pecadores
- No a las tradiciones
rabínicas.
- Ahora porque come con
pecadores.
¿Qué es un publicano?
- Colaborador del imperio
- Tenía las manos
manchadas por el dinero sucio fruto de la extorsión.
- Estaba excluido de la
salvación de Dios
- Si derechos civiles.
- No se podía con ellos
tratar pues contaminaban.
Dios es misericordioso
- Toda la escoria era
bendecida pro Jesús.
- Vino a buscar a los
pecadores.
- Por eso “No necesitan
de médico los sanos, sino los enfermos”
Necesitamos vivir en la misericordia
- Para entender v este
pasaje y no escandalizarnos.
- Dejarse amar por el
Señor.
La mitad de la manta
En una casa humilde vivía un
anciano que no podía trabajar por su debilidad, un matrimonio y un bebé.
Entonces, el señor de la casa decidió mandar para la calle al anciano, porque
era una carga. La esposa le rogó que no lo hiciera, pero no le hizo caso,
entonces le dijo: Dale por lo menos una cobija para que se cubra del frío.
Después de tanto logró que le diera la cobija completa. En eso el bebé desde la
cuna hablo: No dale la mitad, dale la mitad. ¿Por qué preguntó el papá? El bebé
contestó. Para que cuando seas viejo yo te dé la otra mitad.
Una llamada a la conversión
- Sin conversión seremos
muy criticones.
- Y condenaremos a todo y
a todos.
La mirada Nueva…
Allí donde no ves más que una gota de agua, el
científico a través del microscopio ve un mundo de seres vivos que se mueven.
Tus
sentidos te dan una mirada de carne.
Tu inteligencia, una mirada de razón.
Tu Fe, una mirada de Cristo.