Un minuto con Dios

Autor: Luis Céspedes Soto 

 

 

Bendito y alabado seas Señor por tu creación, por tu presencia en nosotros, por tu llamado, que constantemente haces a nuestros corazones, en esta mañana fresca, todo evoca Tu presencia, nuestra alma con los primeros de los pajaritos que al encontrar la naturaleza llena de tu alimento vivo, como lo es ese líquido precioso que tanto significado tiene para ti y para nosotros, trinan, se alegran y festejan tu presencia con sus cantos y sus mejores galas, porque salen a darle la bienvenida al día y saben que con el vienes Tu.
El campo, las flores, los árboles, todo, todo Señor evoca Tu presencia, y no se puede entonces la creación humana quedar atrás, debemos igual que todo lo que compone esta tierra tuya, dar gloria a Dios.
Porque Señor si los que decimos son irracionales no cesan de darte el honor y la gloria, porque el ser humano, no imita sus gestos y actuamos igual, que hace Señor que no sintamos esa necesidad de dar gracias al que todos los
días llega hasta nuestros hogares, para darnos la bienvenida, que hace Señor que en lugar de sentirnos reposados y llenos de optimismo por un día nuevo que Tu creas para nosotros, por ese día que si bien o mal, tenemos la dicha
de contar con tantas maravillas tuyas, en nosotros mismos y a nuestro alrededor, que hace entonces que nos pongamos cargas nosotros mismos a manera de que ya no nos parezca esto, aquello o lo otro, que hace Señor que siempre tengamos quejas en lugar de agradecimiento, porque Señor si vemos que toda la creación crece y se multiplica, vive y vive intensamente en donde este, si estar ambicionando nada mas que servirte y alabarte, que hace que nosotros,
hechos a imagen y semejanza de ti, seamos solo frustración, solo carreras, solo sentimientos negativos aun para
empezar el nuevo día que nos regalas.
Señor te pedimos con todo el corazón y con toda nuestra alma, que pongas en nuestros corazones, sentimientos
nobles, sentimientos de festividad y que al ver que día a día te manifiestas en nosotros, solo debemos ser agradecidos
y en las condiciones que estemos, porque lo importante es que estamos, te demos el honor y la gloria, gracias Señor por la alegría que sentimos hoy, gracias Señor porque hoy estoy un poco agobiado, pero con tu ayuda puedo salir
adelante, gracias Señor porque esta enfermedad que no cesa, me va acercando cada día mas a ti, gracias Señor por las personas que pones a mi lado para que con su presencia y su amor, vayan haciendo mi vida mas fácil, gracias Señor por las personas que a mi lado algunas veces, hacen que mi vida se haga mas difícil, con ellos aprendo a tener paciencia y a ser tolerante, gracias Señor por esos hermanos (as) a los que no le soy tan grato, ellos son Señor escalones que me permiten ir alcanzando día con día la santidad, gracias Señor por esta vivo y dándote el honor y la gloria a pesar de como este este día, gracias Señor por todo, porque solo Tu eres capas de llenar todos los momentos de tristeza o dolor, solo Tu Señor eres capaz de poner toda la alegría que reina en nuestros corazones, gracias Señor por habernos llamado hoy a orar contigo, como le pediste a tus mejores amigos en el Huerto de los Olivos.
Gracias Señor.
Amén.
Paz y bien.