Caer no es fracasar

Autora: Kary Rojas

Libro: Almas gigantes

 

 

El ser humano aunque es Creado a imagen y semejanza de Dios, por su propia humanidad, posee fortalezas y debilidades, puede caer y avanzar. 

No existe criatura que pueda decir “Nunca fallo” “Soy perfecto”, “no me he de equivocar”... 

El que llega lejos fácilmente, porque tuvo suerte y todo se le ha dado hecho; tal vez no logre saborear el triunfo ni descubrir la magnitud de lo que significa este; en cambio, el que ha podido alcanzar sus metas con luchas, esfuerzos y sacrificios; ese que tuvo que caer varias veces antes de llegar; experimenta como crece y madura en su caminar, y encuentra en sus logros, la mayor recompensa a lo que con tanto esfuerzo luchó por ganar. 

El que siente que todo lo tiene, se detiene fácilmente ante la primera dificultad... El que enfrenta sus limitaciones, las asume y las transforma en bendiciones, adquiere destrezas para enfrentar los obstáculos y aún los momentos más difíciles no lo detienen. 

Por todo esto, confirmo una vez más, que caer no es fracasar... Hacer un pare en el camino, a veces es necesario para recuperar fuerzas y continuar... Reconocer con paz y madurez las limitaciones, ayuda a transformarlas en bendiciones... 

Por ello, el que siente que siempre hay algo por hacer, no se aburre de vivir y está en constante superación... Pero el que cree que ya todo lo hizo, pierde la ilusión, busca la salida más fácil, vive en total decepción... 

Una caída no es renunciar, hay que levantarse, limpiarse el polvo del camino, para que el error sin detenerte, te colme de nuevas fuerzas para continuar... Una meta alcanzada no es final, sino el comienzo de un nuevo sueño por realizar...

Nadie puede recorrer tu camino, tu mismo vas haciendo camino al andar...

El que corre no es el que llega primero, sino aquel que aunque da pasos cortos, también da pisadas firmes que dejan huellas en el corazón de los demás...

Eso es Triunfar... eso es realmente GANAR...