El Bautismo del Señor, Ciclo A

"La Cosa empezó en Galilea..."

Autor: Padre José Rodrigo Cepeda

 

 

“La Liturgia nos hace dar un gran salto, silenciado la vida oculta de Jesús, que la resume en estas palabras: "iba creciendo en sabiduría, en estatura y gracia ante Dios y los hombres" (Luc. 2. 52) Vivió en Nazaret. Por eso le llamaban Nazareno. Trabajo al lado de José y le llamaron "el hijo del Carpintero" Y un día salió de su casa a gritarle al mundo la Buena Noticia: Que su Padre Dios nos ama y que El ha venido a enseñarnos como es este amor.

"La Cosa empezó en Galilea..."

Así nos introduce San Pedro en el acontecimiento que en Jesús se llevara a cabo. Y el Bautismo de Juan es el primer capitulo. Era la presentación de Jesús en publico, el comienzo del intinerarío apostólico, y la firma del Padre a toda la personalidad de Jesús.

"Todos se preguntaban si no seria Juan el Mesías...." El Bautista está causando un gran revuelo. Su vida, su atuendo, sus palabras eran una provocación. ¿será el Mesías?

Y Juan responde: "No merezco desatarle la correa de las sandalias" Solo es el precursor.

Y anuncia la diferencia del Bautismo: "Yo bautizo con agua. El os bautizara con el Espíritu Santo y fuego"

Jesús también recibió el Bautismo de Juan :

"Mientras oraba se abrió el cielo" Su oración lo abre siempre pero en este momento era excepcional.

"Bajo el Espíritu Santo sobre él, en forma de paloma" El siempre tenia la manifestación del Espíritu, pero ha llegado el momento de su manifestación a todos los hombres.

"Se oyó al Padre: Tú eres mi Hijo, el amado, el predilecto." Era la complacencia del Padre. Es el Mesías, el Siervo de Yavé, que hoy anuncia Isaías.

Nuestro Propio Bautismo.

Lo de Jesús fue un gesto simbólico. Lo nuestro es un Sacramento. Un nuevo nacimiento. Un "renacer por el agua y el espíritu" (Jn 3.5) Y todo bautizado puede decir con San Pablo "Yo no soy quien vive. Cristo vive en mi" (Gal. 2 20)

Y los títulos adquiridos es ese día de nuestro bautismo son, verdades que podemos gritar a los cuatro vientos:

Yo soy un hijo de Dios.

Lo llamo Padre con verdad. Siento la confianza del hijo. Aunque haya cosas que no entienda, cruces, enfermedades..... sé que él siempre me quiere. "Habéis recibido un espíritu de hijos adoptivos, que nos hace exclamar: Abbá, Padre" (Rom 8. 14 )

Yo soy un hermano de Jesús.

San Pablo decía de Jesús que era "el primogénito de muchos hermanos" (Rom 8. 29 )

Yo soy Templo del Espíritu Santo.

Dios vive en mi, soy su mas preciada Catedral. "¿No sabéis que vuestro cuerpo es Templo del Espíritu Santo?" (1 Cor 6. 19 ) lo que me recuerda lo irreprochable que debe ser mi vida.

Yo soy un miembro de la Iglesia.

Parte viva del Pueblo de Dios. No camino solo. Siempre hay alguien a mi lado. "No mires a mis pecados. Sino a la fe de la Iglesia" rezamos en la Misa

Seré heredero de un Reino Nuevo.

En la casa de mi Padre hay muchas moradas.... sin duda, la tuya... la mía... la del hermano caído.... señalado..... despreciado.... El verdadero sentido de las Bienaventuranzas. Es que nos trazan el camino a seguir para construir el reino de Dios entre los hombres.

Queridos Hermanos de la Lista. María es nuestra Madre. No puede ser de otra forma, si soy realmente hermano de Jesús. Soy hijo de María.

!Muchas gracias. Padre¡ Por el gran regalo de Jesús y de María, y de mi propio bautismo. Ayudanos a llevar tu Luz al mundo entero. Pues también a mí me has dicho: "Id al mundo entero a anunciar el Evangelio"

Con mis pobres oraciones.