Retiros Espirituales

Julio-Septiembre 2003

Autor:  José María Lorenzo Amelibia

Pagina Web: Mística

                  

     

Desde hace veinticuatro años (1979) seis amigos sacerdotes nos reunimos dos veces al año para celebrar retiro espiritual. En verano, cuatro días. En Pascua, una mañana. Te ofrecemos aquí varios puntos de nuestro retiro, con el fin de que te pueda ser útil.

PUNTOS DE MEDITACIÓN

1.- Recitar el "Veni Creator", es preparación para el retiro y objeto de meditación. Fijarse en los imperativos del himno y profundizar con gusto en ellos: "Veni" (con deseo de que venga), "visita" (con la ilusión de que no se marche pronto), "imple" (que nos llene de verdad, que notemos su plenitud), "accende" (que incendie de veras nuestro corazón). Llena, E.S. los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

2.- Este año es del Espíritu Santo. Quisiera purificar más y más mis sentimientos, que el Espíritu Santo ilumine más nuestras mentes e incendie de amor nuestro corazón. Vamos a dejarnos invadir por esta Tercera Persona de la Santísima Trinidad. Para ello, quedarnos más tiempo en la oración en su presencia. Es pena que muchas veces ojeamos todo, curioseamos todo como si fuera un periódico, y así dejamos pasar ocasiones de aprovecharnos de escritos espirituales. ¡Pero si lo importante no es enterarse, sino profundizar, interiorizar!

3.- Que cada vez sea más trinitaria nuestra espíritualidad. En nombre de la Santísima Trinidad, hemos de propagar cada vez más por nuestro ambiente lo que es el Reino de Dios. Caminar hacia Dios no sólo nosotros, amigo, sino enseñar a otros a caminar hacia el Padre: la puerta para ello es el Hijo, y la llave de la puerta el Espíritu Santo; la casa el Padre. Así lo explicaba San Simeón el gran místico de la edad media, hoy más que olvidado. ¡A unirnos todos en este santo propósito, a quitarnos la careta de ese falso pudor que nos entra cuando queremos ser del todo espirituales, si alguien nos mira!

4.- Sin miedo hemos de lanzarnos, aunque seamos bastante viejos a evangelizar nuestra sociedad, nuestra cultura, que tanto ha caído en el último tercio del siglo XX. Ha sido de lo peor de nuestra Historia. A ver si la nueva evangelización nos anima a todos desde la más profunda renovación interior. Si el mundo es de Dios, vamos a dárselo a El con toda la renovación que quiere.

5.- Dios nos lleva a menudo por caminos distintos a los que nosotros hubiésemos elegido. Pero no conviene murmurar ni quejarnos. El ha de sacar mucho bien para nuestras almas y para su Reino, si sabemos reaccionar en su confianza. Si tuviéramos un poco más de fe y en el amor que el Señor nos tiene, miraríamos las adversidades con agradecimiento. En mi vida he comprobado que Dios escribe derecho con líneas torcidas. Creo que el mayor fracaso de mi vida, luego el Señor lo ha aprovechado para darme una nueva vocación en la cual ni podía yo soñar. Bendito sea Dios que me trazó una línea de vida distinta, a través de senderos un poco raros.

6.- Cuando uno lucha con gran ilusión y amor hay alegría incluso en la misma batalla. Alegría y esperanza. Fomentar estos sentimientos en estos tiempos. El que siente alegría más fácil llega a la conquista. El que procura alegría interior, más fácil encuentra al Señor. Nos alegramos los que buscamos al Señor.

7.- ¿No ardía nuestro corazón cuando nos explicaba las Escrituras? Que abra el Señor lo que está cerrado. Que abra nuestras ideas cerradas a la esperanza. ¡Que El nos abra! Y encienda nuestro corazón mientras leemos las Escrituras.

8.- Señor, Jesús, explícanos las Escrituras, enciende nuestro corazón mientras nos hablas. (Lo repetimos varias veces con melodía de J.I.; conmueve interiormente).

9.- Dios me inspira pedir algunas gracias con insistencia: unas con relación a otros; otras, para mi vida interior (don de oración, don de abnegación, perseverancia final). Para el Reino de Dios, la santidad de los sacerdotes y personas consagradas. Después algunas gracias para personas muy queridas... Esto me hace pensar con total confianza que el Señor me lo ha de conceder; no puede caber duda, porque cuanto le pido siempre va encaminado a su gloria y a nuestra salvación eterna. Y, si alguna cosa le suplico que no sea exactamente para la gloria de Dios, lo hago de una manera condicionada. Y pasan los años; y mi fervor, creo, no va a menos. Luego ya se nota esta bondadosa asistencia del Señor en mi vida. Es extraordinario comprobar cuán bueno es Dios para aquellos que ponen un poco de su parte. ¡Qué será para los santos que han conseguido ser fieles al Señor en todo o en casi todo!

10.- Encuentro con la voluntad de Dios. Es algo maravilloso, cuando lo hacemos de manera consciente. Sentirnos con humildad junto a El, cuando no nos encontramos con ella. Acudir al dolor de nuestras culpas y al Sacramento del perdón. Sentirnos perdonados por el Señor. Suplicar el don del perdón, de la verdadera penitencia.

11.- Convencerse: lo más importante de todo el día es el encuentro (los dos o tres encuentros) más prolongado junto al Señor. Y durante el día, de vez en cuando, una jaculatoria para actualizarnos en la presencia y amor a Jesús. "Una vez más descubro que sin oración no podemos ser sacerdotes santos". (F.M.)

12.- Que el Señor nos conceda estar cada vez más enamorados de El. Nosotros podemos poner algo de nuestra parte: ocuparnos de "sus cosas" y estar con El muchos ratos en el Sagrario. Después unirnos con jaculatorias. Una que me gusta mucho es la de la confianza: Sagrado Corazón de Jesús en vos confío. Aplicarla a la conversión de personas alejadas de Dios. Otra, la del Padre Nuestro: "Venga a nosotros tu Reino". Poco a poco las cosas de Dios nos afectan, son nuestras cosas, estamos enamorándonos de El.

EXAMEN PRÁCTICO

I VÍAS MÍSTICAS.

- ¿Eres consciente de que el Señor invita a todos hacia las alturas, incluso por vías místicas?

- ¿Eres fiel a la oración normal? ¿Hoy cómo te ha ido?

- ¿Llevas la lectura espiritual como una experiencia de lo divino?

- ¿Cómo practicas la fe y la esperanza? ¿Hoy?

- ¿Va aumentando en ti la presencia divina?

- ¿Va aumentando tu vida ascética con el fin de llegar a la mística?

- ¿Te dejas llevar por la Providencia de Dios?

- ¿Profundizas en la humildad en la oración?

- ¿Remueves los obstáculos de comodidad y egoísmo que te impiden avanzar?

II.- DESARROLLO DE VIDA INTERIOR

- ¿Cómo has practicado tu oración mental?

- ¿Cómo has luchado contra las distracciones?

- ¿Huyes del pecado?

- ¿Te impones alguna penitencia por los pecados de cada día?

- ¿Tus prácticas de piedad son conscientes, rutinarias, nulas?

- ¿Cómo has ido hoy en materia de abnegación?

- ¿Te has olvidado hoy alguna vez del "yo" propio para

entregarte de lleno a Dios y al prójimo?

- ¿Amas algo la soledad? ¿La buscas para encontrarte con Dios?

III LUCHA CONTRA EL PECADO

- ¿Hoy he luchado contra las tentaciones?

- ¿He sido consciente, al menos después, de las caídas en

faltas? ¿O voy perdiendo sensibilidad moral?

- ¿Procuro formar mi conciencia ética, según las directrices de

la Iglesia?

- ¿Cuál es mi pasión dominante?

- ¿Cuál es la raíz principal de mis faltas?

- ¿Me levanto en cuanto me doy cuenta de que he caído?

- ¿Hago pronto un acto perfecto de amor a Dios?

- ¿He huido de las ocasiones?

- ¿He considerado la brevedad de la vida para luchar contra el pecado?

- ¿Practico el recogimiento interior para luchar?

- ¿Hago sacrificios para fortalecer mi voluntad?

ADVERTENCIA FINAL

PARA NOSOTROS ES MUY IMPORTANTE EL RETIRO

Necesitamos dedicar un día al mes al retiro espiritual: medio día en soledad al menos relativa. Día de revisión, de meditación de encontrarnos más próximos a Dios. No es necesario hacerlo varios juntos; bueno sería, pero no siempre es posible. Cuando se hace solo es más "desierto".

Estar sobre todo ese día como la esponja en el mar, sumergidos en Dios. Que las aguas de su amor nos vayan penetrando por esos poros tantas veces ajenos al Señor. Permanecer envueltos en el silencio exterior y sobre todo interior. Dentro de su paz.

Pero no creas que el enemigo de tu paz te va a dejar en perfecto sosiego. Quizás te suscite inquietudes acerca del pasado o del futuro; quizás cunda en tu alma el desaliento o la tristeza. Por eso no vayas a pasártelo bien en esa especie de unción romántica. No vayas a gozar; vete a buscar a Dios. Y tampoco vayas con temor a fantasmas. Pero ayúdale a Dios a que te ayude. Desecha los pensamientos deprimentes, pero sin ponerte a dialogar con ellos. Dile al Señor: ¡Señor, yo te amo; en Ti confío y creo en tu amor!

Mucha gente practica el retiro mensual. Incluso gente trabajadora lo hace con el plan Zen o yoga cristiano. Los conozco, aunque no he estado todavía con ellos.

TERMINAR EL RETIRO DANDO GRACIAS A DIOS POR TODO; PEDIRLE PERDON DE LAS LAGUNAS; HACER PROPOSITO FIRME. Y NO OLVIDAR DE DEDICAR BUEN RATO A LA ORACION DE PETICION.