Retiros Espirituales

Julio a Septiembre 2000

Autor:  José María Lorenzo Amelibia

Pagina Web: Mística

                  

     

Aunque este retiro rima más con el tiempo pascual, pues lo hicimos durante la semana de Pascua, lo ofrecemos ahora. Nos reunimos cinco amigos el martes de Pascua en la capilla del Hospital de Navarra en la presencia del Señor. Estas han sido nuestras ideas para hacer oración sobre ellas.

1.- ("Resurrexi et adhuc tecum sum" = He resucitado y aún estoy contigo) Contigo, Señor he estado, contigo quiero estar. Sin literaturas. En plena desnudez de corazón. Contigo que has resucitado. Hasta el fin de nuestros días que ya queda poco.

3.- Nuestra vida avanza. Hemos hecho (con un realismo optimista) tres cuartas partes de la misma. Una nueva Pascua. Quedan muchas menos de las que venimos celebrando. Atráenos, Señor. Que pasan los años y no avanzo en perfección al ritmo de ellos. Voy muy lento. Ayúdanos.

4.- Señor, yo había puesto el corazón en nuestra amistad. A través de ella podíamos avanzar con mayor ritmo. Renuévanos en esta Pascua florida; en realidad estamos en época de vacas flacas en la amistad en la fe. Ayúdanos a quienes durante tantos años hemos permanecido unidos en lo espiritual. Manténnos ahora también unidos, con mayor fervor. Danos un poco de aquel fervor de los amigos de San Ignacio y de Javier. Me impresionó la lectura de la vida de San Ignacio. Ahora estoy leyendo la de Javier. Me da aquel grupo santa envidia. ¡Quién pudiera llevar una amistad como ellos! Me gustaría juntarnos a menudo, pero para entusiasmarnos como ellos en el viaje a Roma. Cantaban salmos, entraban a curar enfermos en hospitales, predicaban en cualquier lugar, llamando la atención de la gente. Se enardecían unos con otros. Hacían locuras de amor a Dios y al prójimo. Les dolía ver la impiedad e increencia de la gente y entraban pronto en diálogo con todos.

5.- Vamos a vivir las lecturas de la Misa: Cristo ha resucitado. Alegría al ver a Jesús, como la Magdalena. ¿Qué ha sido la resurrección? Ha cambiado el estado de ánimo de los Apóstoles: de tristeza y tedio a ilusión y alegría. ¿Te ha alegrado a ti la resurrección? Haz posible que te alegre.

6.- Fuerza de la resurrección. Experiencia del Padre tenía Jesús. Nosotros también. Hombres nuevos con la nueva vida de Jesús resucitado. Vamos a vivir el misterio. Ya lo hemos estudiado y explicado en abundancia.

7.- Entusiasmo con los de Emaús. Jesús vive y ha resucitado con nosotros. Quédate siempre, Señor, con nosotros.

8.- Que nuestra Pascua sea no solo el día y la semana, que dure los cincuenta días con el final de Pentecostés. Cristo resucitado ha de ser quien nos una. Sus llagas son gloriosas, signos de esperanza para nosotros. Como nuestros sufrimientos que han de ser gloriosos. Signos de esperanza.

9.- Contemplar las manos del Resucitado. Manos de Cristo para consolar, manos para acariciar, manos para darnos su cuerpo y su sangre, manos para dar, manos para recibir, manos que dan vida. Así han de ser también nuestras manos.

10.- Que el Señor nos dé en esta Pascua el deseo de perfección. Aspirar sin cesar a las cosas de arriba; gustar de las cosas de arriba, donde Jesús está sentado a la diestra de Dios Padre. Que nuestro deseo sea constante... Que nuestro deseo sea humilde... Que nuestro deseo sea práctico y eficaz... ¡Oración! Que nuestro deseo sea predominante sobre todas las cosas... Que nuestro deseo sea RENOVADO EN ESTA PASCUA. ¡AQUI ESTAMOS!

EXAMEN PRÁCTICO

I CORRESPONDENCIA A LA GRACIA DE DIOS.

- ¿Acepto la humillación como una gracia de Dios?

- ¿Miro como gracias actuales las buenas lecturas, los buenos amigos, los buenos ejemplos...?

- ¿Deseo como el aire que respiro la gracia de Dios?

- ¿Si en ocasiones no soy fiel a la gracia de Dios, me acerco a El con humildad más tarde?

- ¿Purifico mi corazón con frecuencia?

- ¿Venzo las repugnancias para avanzar en la virtud?

- ¿Abuso del tiempo y del favor que me ofrece el Espíritu Santo?

- ¿Estoy atento a los impulsos y mociones del Espíritu Santo?

- ¿Si oigo su voz, respondo y ejecuto su insinuación?

- ¿Pretendo "servir a dos señores"?

- ¿Voy poco a poco desligándome de las ataduras mundanas?

- ¿Practico la mortificación voluntaria como medio ascético?

- ¿Tengo aficiones desordenadas?

- ¿Soy obediente? ¿Soy humilde en el trato?

- ¿Mantengo paz y calma en mi espíritu?

- ¿Soy dócil a la acción de Dios?

II ORDEN EN MI VIDA.

- ¿Tengo trazado un plan de vida, aunque sea a rasgos generales?

- ¿Cómo aprovecho el tiempo?

- ¿Llevo orden en mis cosas de conciencia?

- ¿Cómo me comporto en cuestión de correspondencia epistolar?

- ¿Están bien en orden mis asuntos profesionales?

- ¿Demoro mis resoluciones enojosas más de lo debido?

- ¿Cómo he andado hoy en puntualidad?

- ¿Cuido mi aseo personal y el de mi ropa?

- ¿Mantengo el orden en mi casa, libros, apuntes?

III LECTURA ESPIRITUAL.

- ¿Qué libro estás leyendo de lectura espiritual?

- ¿Vas formando biblioteca con títulos de este tenor?

- ¿Influye en tu vida la lectura espiritual?

- ¿Contrarresta el influjo de la propaganda mundana?

- ¿Te ayuda a mantener a tono la vida interior?

- ¿La aprovechas para la oración?

- ¿Procuras leer muy despacio, haciendo pausas para orar?

- ¿Repites de vez en cuando los libros que mayor bien te han causado?

- ¿Sueles pasar de la lectura a la oración y viceversa?

- ¿Subrayas, anotas las ideas que más te conmueven?

- ¿Hablas con alguien de temas de lectura espiritual?

- ¿Te ocupas, como Jesús, de las cosas del Padre?

- ¿Es el apostolado una exigencia natural de tu vida interior?

ADVERTENCIA FINAL

PARA NOSOTROS ES MUY IMPORTANTE EL RETIRO

Necesitamos dedicar un día al mes al retiro espiritual: medio día en soledad al menos relativa. Día de revisión, de meditación de encontrarnos más próximos a Dios. No es necesario hacerlo varios juntos; bueno sería, pero no siempre es posible. Cuando se hace solo es más "desierto".

Estar sobre todo ese día como la esponja en el mar, sumergidos en Dios. Que las aguas de su amor nos vayan penetrando por esos poros tantas veces ajenos al Señor. Permanecer envueltos en el silencio exterior y sobre todo interior. Dentro de su paz.

Pero no creas que el enemigo de tu paz te va a dejar en perfecto sosiego. Quizás te suscite inquietudes acerca del pasado o del futuro; quizás cunda en tu alma el desaliento o la tristeza. Por eso no vayas a pasártelo bien en esa especie de unción romántica. No vayas a gozar; vete a buscar a Dios. Y tampoco vayas con temor a fantasmas. Pero ayúdale a Dios a que te ayude. Desecha los pensamientos deprimentes, pero sin ponerte a dialogar con ellos. Dile al Señor: ¡Señor, yo te amo; en Ti confío y creo en tu amor!

Mucha gente practica el retiro mensual. Incluso gente trabajadora lo hace con el plan Zen o yoga cristiano. Los conozco, aunque no he estado todavía con ellos.

TERMINAR EL RETIRO DANDO GRACIAS A DIOS POR TODO; PEDIRLE PERDON DE LAS LAGUNAS; HACER PROPOSITO FIRME. Y NO OLVIDAR DE DEDICAR BUEN RATO A LA ORACION DE PETICION. JULIO - SEPTIEMBRE DEL 2000