Retiros Espirituales

Julio-Septiembre, 1999

Autor:  José María Lorenzo Amelibia

Pagina Web: Mística

                  

     

EL PLAN DE ESTE RETIRO

La dinámica del retiro ha sido la comunicación de nuestra vivencia espiritual del año. Diálogo abierto sobre esta experiencia entre todos. Oración.

Después del retiro se envía a cada uno de los componentes el resumen del mismo. Finalidad: que durante el año pueda meditar todos los puntos objetos de nuestra reflexión común.

Hemos participado siete sacerdotes. Constituye el 17º retiro anual. Comenzamos en Leire en 1977. A partir de 1980 todos los años ha sido en Estíbaliz.

RESUMEN DE LAS INTERVENCIONES

1.- Comenzamos el retiro haciendo una paráfrasis del Veni Creator Spiritus y del Adoro te devote. Merece la pena meditar de vez en cuando estos hermosos himnos litúrgicos. A veces ocurre: frases leídas 313 veces no producen ninguna impresión; a la 314 conmueven el alma hasta el fondo.

2.- Ver el paso del tiempo. Es menos lo que nos queda de vida que cuanto hemos pasado. Ser muy conscientes. Seremos dentro de poco durante más o menos tiempo gra

3.- Este año agradezco a Dios una gracia especial, la gracia 1993: ha sido encontrar a D. Félix Beltrán y su libro "El sacerdote de hoy y de siempre", y sus cintas. Ha renacido con fuerza en mí de nuevo la emoción sacerdotal; como en los mejores tiempos; como en los primeros años del sacerdocio. Impresiona un sacerdote de setenta y dos años con la misma ilusión, con la misma emoción, con mucho más amor a Dios y a sus hermanos que un recién cantado Misa.

4.- He revivido de nuevo la gracia de la ordenación. Gusté y regusté la ceremonia de la ordenación sacerdotal de Sevilla. Hice el propósito de al menos una vez al año visualizar esta cinta, para remover las brasas de la gracia que nos fue dada por la imposición de las manos.

- He revivido este año con intensidad la gracia de la Comunión al celebrar el 50 Aniversario de mi primera Comunión.

- Estoy leyendo de nuevo la Vida del Cura de Ars. Para mí es una joya. Una utopía imposible de realizar en la propia vida. Pero merece la pena vivir el espíritu de este sacerdote desde la primera línea. ¡Cuánto bien hace el cura de Ars, incluso después de muerto! Mis sueños de seminarista, ser como el cura de Ars. Luego, ¡qué dificultades! Parece que me ha salido el tiro por la culata. Sólo me queda confiar en la misericordia de Dios.

5. - Vibrar con la emoción del sacerdocio, como un recién ordenado. Recuerdo la primera vez que abrí el Sagrario. ¡Qué amor de corazón a corazón! Pues es el mismo Jesús el que baja a mis manos en el Altar, el que distribuyo en la comunión, el que permanece día y noche en el Sagrario. El mismo Jesús que teníamos en la capilla de la Asunción.

6.- Descuidar este año una breve temporada la oración ha sido cosa mala. Intentar compensarlo con actividades pastorales, el gran peligro. Me he dado cuenta a tiempo y he podido rectificar.

7.- Recuerdo a menudo la figura de un sacerdote, fallecido en los años setenta, es de nuestros días: Aita Patxi. Casi siempre iba con la Eucaristía en el pecho, pues marchaba de un pueblo a otro, de una clínica a un hospital siempre visitando enfermos y llevándoles al Señor.

8.- Me edifica el caso de una señorita: una hora antes de comenzar la catequesis está en la Iglesia. Me ha indicado el porqué: practicar largamente la oración antes de comunicar el mensaje del Evangelio. De verdad, se nota. Merece la pena imitarla.

9.- "Una vez más descubro que sin oración no podemos ser sacerdotes santos", me escribía Paco hace muy pocos meses. Y es bueno que experimentemos esto. No se trata de la oración oficial solamente, sino de la voluntaria, de la personal, del tiempo que dedicamos a estar con Jesús.

10.- Gusto quién es Jesús más que en mis años jóvenes. ¡Cuántas horas con El en estos cuarenta años! De verdad El no me ha defraudado.

11. - Jesús no ha condicionado a atender nuestra oración por nuestros méritos, sino por su promesa infalible: "Todo lo que pidiéreis al Padre en mi nombre, se os concederá".

12.- Observo en muchos compañeros (en demasiados, por no generalizar) un individualismo feroz. Cada uno va a lo suyo. Por supuesto ninguna intercomunicación de tipo espiritual. ¿La parroquia en propiedad no será causa de este individualismo y distanciamiento entre compañeros sacerdotes? Creo que sí es una de las causas. Y no nos damos cuenta de que la Parroquia es de Dios.

13. - Hoy hemos de influir de un modo cristiano ante todo en nuestro ambiente. Pero no olvidemos las líneas transversales de la educación. En nuestro caso la línea transversal es: siempre sacerdotes, en todo lugar sacerdotes. Así nuestro apostolado ha de volar en lo posible a otros ambientes con afán misionero: en la jerarquía para que no se duerma en su pastoreo; en la vida contemplativa, verdadera joya de la Iglesia; en familias amigas; en todo lo que podamos.

14.- El problema de las misas múltiples es duro: cansancio, pérdida del fervor de las primeras, hastío a veces. ¿Que solución viable podría caber?

- El cura de Ars gozaba repartiendo la Comunión. Aunque hubiera varios miles. A veces hasta derramaba lágrimas. Cuando el cansancio es físico, se comprende más la dureza. El cansancio espiritual suele ser falta de actualización de la fe. Merece la pena enamorarse más de Cristo Eucaristía. Menos charla inútil o menos televisión. El ha de ser nuestro gozo íntimo.

- Comenzar muy conscientes, muy despacio cada Misa. Al preparar las cosas hacerlo de manera muy ilusionada. Se puede. P. ejemplo: al encender las velas decir: "Enciende mi lámpara, Señor. Tú, Señor iluminas mis tinieblas". Recordar aquellas antiguas oraciones mientras el Sacerdote ser reviste.

-¿Por qué no preparar nuestras Eucaristías al menos como se prepara un profesional sus cosas?

 

EXAMEN PRACTICO

Hemos de examinarnos con sinceridad. Utilizar el cuadernillo y el bolígrafo. Cada uno individualmente. Se puede hacer después una puesta en comun.

1.- AMOR A DIOS

- ¿Cómo demuestro mi amor a Dios?

- ¿Me doy cuenta de que es El, su gloria, el fin de mi vida?

- ¿Hago frecuentes actos de amor a Dios?

- ¿Procuro mi amor al prójimo por amor de Dios?

- ¿Cómo he tratado a mis semejantes?

- ¿Me he preocupado de alguna manera de extender el amor de Dios?

- ¿Hago algo por que crezca en mí su amor?

- ¿He leído hoy algún libro de espiritualidad para fomentar el amor a Dios?

- ¿Durante el día soy consciente de la presencia amorosa de Dios?

- ¿Me sirvo de alguna estampa, de alguna frase, de algo que me recuerde el amor y la presencia de Dios?

 

2.- AMOR AL PROJIMO.

"Un mandamiento nuevo os doy, que os améis unos a otros como yo os he amado".

- ¿Qué he hecho hoy por mis semejantes?

- ¿Cómo me he comportado con los de casa?

- ¿Con las personas del trabajo mío?

- ¿Me he sacrificado en algo por los demás?

- ¿He elegido para otros lo mejor?

- ¿He renunciado a mi egoísmo?

- ¿Me preocupo de los más débiles, marginados, pobres?

- ¿Doy parte de mi dinero a los necesitados?

- ¿He tratado a mis subordinados con amabilidad?

- ¿He criticado de los superiores? ¿De los iguales?

- ¿Qué determinación he hecho para no criticar?

- ¿Enfoco inseparablemente mi amor a Dios y al prójimo?

- ¿He hecho un esfuerzo para pensar bien de todos o para excusar las faltas de mis semejantes?

 

3.-JESUCRISTO EN MI VIDA.

- ¿Procuro leer libros para conocer a Cristo?

- ¿Trato con Jesús en la oración?

- ¿Qué hago para imitarle?

- ¿Cómo procuro revestirme de Cristo?

- ¿Aspiro a las cosas de arriba? ¿Las busco? (San Pablo).

- ¿Me preocupo en difundir su mensaje? ¿Cómo?

- ¿Qué hago para que Cristo influya en mi vida de trabajo? 

ADVERTENCIA FINAL

PARA NOSOTROS ES MUY IMPORTANTE EL RETIRO

Necesitamos dedicar un día al mes al retiro espiritual: medio día en soledad al menos relativa. Día de revisión, de meditación de encontrarnos más próximos a Dios. No es necesario hacerlo varios juntos; bueno sería, pero no siempre es posible. Cuando se hace solo es más "desierto".

Estar sobre todo ese día como la esponja en el mar, sumergidos en Dios. Que las aguas de su amor nos vayan penetrando por esos poros tantas veces ajenos al Señor. Permanecer envueltos en el silencio exterior y sobre todo interior. Dentro de su paz.

Pero no creas que el enemigo de tu paz te va a dejar en perfecto sosiego. Quizás te suscite inquietudes acerca del pasado o del futuro; quizás cunda en tu alma el desaliento o la tristeza. Por eso no vayas a pasártelo bien en esa especie de unción romántica. No vayas a gozar; vete a buscar a Dios. Y tampoco vayas con temor a fantasmas. Pero ayúdale a Dios a que te ayude. Desecha los pensamientos deprimentes, pero sin ponerte a dialogar con ellos. Dile al Señor: ¡Señor, yo te amo; en Ti confío y creo en tu amor!

Mucha gente practica el retiro mensual. Incluso gente trabajadora lo hace con el plan Zen o yoga cristiano. Los conozco, aunque no he estado todavía con ellos.

 TERMINAR EL RETIRO DANDO GRACIAS A DIOS POR TODO; PEDIRLE PERDON DE LAS LAGUNAS; HACER PROPOSITO FIRME. Y NO OLVIDAR DE DEDICAR BUEN RATO A LA ORACION DE PETICION.JULIO SEPTIEMBRE 1999.