Refugio de mi fe
Autor: José María Lorenzo Amelibia
Pagina Web: Mística
Dulce manjar, tesoro inmaculado.
Rico en sabor; inmenso en el misterio.
Torrente silencioso; mar oculto.
Paciente por la espera en el sagrario,
En tu sombra de amor yo me cobijo.
No veo, ni oigo.
Escucho tu rumor.
¡Silencio eterno!
¡Me entrego; te recibo!
¡Yo te adoro!
Ciego del horizonte soy,
Sin ver lo eterno.
Sin ti, mi alma muerta se eclipsara.
¡Tú eres mi fuerza.
Tú eres mi alimento!