Eucaristía

Santos Eucarísticos

Autor:  José María Lorenzo Amelibia

Pagina Web: Mística

                  

     

Me admira el amor de estos hombres y mujeres que pasaron gran parte de su vida arrodillados junto al Sagrario, a los pies de Jesús Eucaristía. Leo y releo sus biografías; y aprendo de ellos la gran realidad: el Sagrario es la antesala del Cielo; la Comunión, fuente de gozo. Pero no se trata de hombres y mujeres que olvidan las necesidades del mundo: la mayor parte de ellos han consagrado su existencia a obras de apostolado exterior de gran envergadura. De las noches y días de "asueto" en contemplación del Amor de los Amores, salían encendidos, deseando que el mundo arda en el fuego divino.

En el Cielo las vírgenes seguirán al Cordero por dondequiera que vaya; los mártires llevarán en sus manos la palma, como símbolo de su heroísmo por sellar con su sangre la certeza de su fe. Y... ¿los santos eucarísticos? Ellos, sellados durante su vida entera por la fe total al Sacramento del Amor, han de permanecer por siempre en el mismo corazón de Cristo. ¡Allí se encontrarán ya varios de los lectores de este "Ameno Huerto", que han traspasado las fronteras de este mundo!

Dicen de San Pascual Bailón, uno de los grandes enamorados de la Eucaristía, que, cuando celebraban sus funerales, abrió por tres veces los ojos en el momento de la elevación de las Sagradas Especies, en señal de adoración. ¡Homenaje final a Aquel Amigo que le recibía para siempre en la Gloria! En su juventud Pascual sentía a veces tal gozo en sus visitas íntimas a Jesús que danzaba en su honor delante del Sagrario, simulando lo del Rey David junto al Arca de la Alianza.

¡Vivir como estos hombres de Dios, siempre unidos al Gran Amor! Todo es cuestión de fidelidad y de ser consecuentes con nuestra fe. Los años pasan. Yo quisiera ser como aquellos que consiguieron su salvación, gracias a la fortaleza que sacaron de sus comuniones y visitas; de su amor acendrado al Gran Sacramento.