Eucaristía

Aquel libro nefasto

Autor:  José María Lorenzo Amelibia

Pagina Web: Mística

                  

     

Me abrumó aquel libro de falsa espiritualidad. ¡Era veneno más que espíritu! Decía que la Sociología ha desbancado a la Filosofía como "criada" de la Teología. ¡Todo lo contrario de la doctrina de Santo Tomás! Así nos van las cosas.

Decía el nefasto mamotreto, de cuyo nombre no quiero acordarme, que nos orientamos hacia una religión más secularizada y menos sagrada. Y se quedaba el autor tan tranquilo; sin reaccionar; como asumiendo "a lo bobo" y con los brazos cruzados, la destrucción del Reino de Dios. Y terminaba constatando la desaparición de la religión en la sociedad industrial.

Pero nosotros decimos: ¡Un hijo jamás se cruza de brazos ante el peligro de ruina del negocio de su padre; grita; pide auxilio; trabaja de sol a sol; busca relaciones; no duerme.

¡Nuestros templos se van cerrando a la adoración eucarística! La fe decae. Es preciso volver a las fuentes de agua viva. Hacer que se abran los remansos de paz donde mora Jesús, prisionero de amor. Decir a los curas que no puede seguir esto así; organizar turnos de adoradores que cuiden la iglesia y recojan los tesoros de gracia que Jesús reparte desde el sagrario... ¡y nadie los aprovecha!

La salvación puede llegar del mundo de los seglares. La Eucaristía vigoriza más y más la propia fe; eleva y purifica el amor a Dios y al prójimo; es el lugar de encuentro de todos los

creyentes y el pararrayos del castigo divino. Unirnos en el Sagrario y en la Comunión con todos cuantos reciben y visitan al Señor. Imploremos su bendición y fuerza divina para romper ese círculo vicioso, en que ha entrado un sector considerable de nuestra Iglesia Católica.