Su único tesoro

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

El grito” es una de las pinturas expresionistas más famosas de Edvard Munch, donde refleja el drama de una persona tapándose los oídos como queriendo escapar de los problemas que le atormentan. Aunque el lienzo refleja el drama del autor, cada día la sociedad se ve reflejada en ese clima de tensión, agresividad y falta de humanismo al cual nos estamos acostumbrando casi imperceptiblemente.

Echemos un vistazo al comportamiento de los choferes en la calle, la prepotencia de los motoristas, el desespere de la gente en las colas de las oficinas públicas, busetas o servicios. El mal genio que se cargan algunos en la calle. ¿Te has fijado que los desesperados además de arrollar, echan la culpa a los otros de sus mismos atropellos? En cambio el hombre prudente es aquél que conserva la paz en su interior y huye del estrés. La gente por lo mismo recurre a diversos tipos de terapias para no caer en depresión. ¿Qué hacer? Reserva cada día un momento al silencio y a la meditación para encontrarte contigo mismo y con Dios. Además de descansar la mente, te ayudará a alimentar el optimismo, las ilusiones y los nobles ideales.