Salven al soldado Ryan

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

Seguramente recordarán la película Salven al Soldado Ryan que copó hace unos años las pantallas del cine y de la televisión. Al final de la película el protagonista se preguntaba: -¿He vivido bien?, ¿He sido una buena persona?-. Cansado por el pasar de los años, el soldado Ryan quería saber si su vida había tenido algún sentido, o como él mismo se interrogaba, si todo había valido la pena.
Esta misma pregunta nos asaltará a todos no sólo al final de nuestra propia película, sino también en el momento presente ya que la vida es una y sólo se vive una sola vez, por eso necesitamos saber qué sentido le estamos dando a nuestra vida. Siguiendo con la imagen del cien, de qué género de película es mi vida: un largometraje aburrido que nadie estaría dispuesto a ver o más bien es una historia de amor, de entrega generosa al ser amado. Es una vida de alguien que persigue un ideal, una vida épica o una vida de oscura y gris. Una vida de un santo o la historia de un psicópata.
La respuesta no llegará al fin de la vida, sino que dependerá de lo que estamos sembrando durante nuestra vida. Como reza el dicho: el que siembra vientos cosecha tempestades. Hoy ya puedes conocer el desenlace de tu propia película.