¿Qué signo eres?

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

Me ha dejado sorprendido el constatar hasta qué punto la superstición se ha colado en la vida de algunas personas. Resulta que la señora Rita, por llamarla de algún modo rehusó usar su auto para salir al trabajo porque su horóscopo le vaticinaba una desgracia ese día en las vías. No hubo forma de hacerle cambiar de opinión. De inmediato caí en la cuenta que la proliferación de adivinas, pitonisas, brujas, hechiceras, “mediums” no es un cuento sino algo real, porque la gente se lo cree. Hay personas que compran su pulsera para librarse de un maleficio, llevan un limón en el bolso porque absorbe la energía negativa, cuelga la trenza de ajos detrás de la puerta, le soban la panza a Buda para que les dé dinero ¡y qué decir de la proliferación de los amuletos! Y no les doy más ideas porque seguro que a más de alguno se le antoja hacerlo. El relativismo religioso está produciendo miedo e inseguridad en las personas. ¡Cuánta fragilidad psicología! ¡Qué capacidad tan grande de sugestión! Cuanto más se recurra a estas cosas, más psico-dependientes y más vulnerable se harán.