Ídolos, insulsos y valientes

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

En el marco de la final del fútbol se oyen y se ven muchas cosas que nos hacen pensar y reflexionar. Sucede de todo, desde el chico que se ha hecho un corte de pelo semejante al de Ronaldo en el partido de Brasil contra Alemania y Turquía, hasta las más agudas acusaciones contra los árbitros, que al parecer, han causado un fuerte dolor de cabeza a la FIFA. Otro hecho es que a nadie le gusta ver perder a su equipo y las derrotas dejan heridas que duelen. Me topé incluso con uno que para no llevarse desilusiones, prefiere no tener equipo, es un espectador impasible. ¡Qué insulso! De todo esto: ídolos que imitar, culpables que buscar, desilusionados y estoicos, yo me quedo con la actitud de aquél otro que no tiene miedo a apostar por un equipo y de reconocer cuando se pierde, porque “los grandes hombres, como los equipos, se miden por las veces que se levantan” ¡Vaya!, éste sí que sabe.
Hay que tomar nota y recordar estas palabras cuando las derrotas se crucen en nuestro camino. ¿Quién no tiene derrotas de vez en cuando? La existencia humana conlleva buenos y malos momentos y de todos se puede aprender mucho. Lo importante no son las batallas sino la guerra. Como apuntaba Cervantes: “es mejor el camino que la posada”.