Héroes desconocidos

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

Me contaron hace unos días la historia de un niño sincero y atrevido que un día le dijo a su mamá: “Mamá, eres hermosa, pero tus manos son tan feas”. Tiempo después Óscar conocería la historia de sus manos. “Hace tiempo dormía profundamente un niño. De pronto se encendió el mosquitero de la cuna y las llamas amenazaban la vida del bebé. La sirvienta corrió despavorida, mas la madre heroica y decidida, dominó el fuego a manotazos, salvando de las llamas a su hijo. Y sus manos de color de armiño quedaron sin piedad carbonizadas. Cuando al final las vendas le quitaron, sus manos por el fuego quedaron deformadas. El pequeño escuchaba a su padre sin pestañear. Cuando terminó el relato, Óscar, con lágrimas en los ojos, corrió hacia su madre y le dijo entre sollozos: “No hay manos cual las tuyas en el mundo, madre”.
¿Cuántas historias semejantes permanecen ocultas? Óscar nunca más se quejará antes de conocer los motivos de tal o cual acontecimiento. Hay muchas mamás que se desviven por sus hijos por puro amor desinteresado, sin recibir nada a cambio, héroes desconocidos que algún día no muy lejano recibirán su recompensa.