¿Dónde está el abuelo?

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

Dos niñitos modernos se acercaron a su anciana abuelita preguntándole: “Abuela, ¿cómo nacen los bebés?” – Los traen las cigüeñas- respondió ella-. Los chiquillos se miraron con picardía mutuamente y uno le dijo al otro: “¿le decimos la verdad o la dejamos que muera en la ignorancia?”. ¡Hay que ver cuánto saben los niños de hoy! ¡Qué bien los tenemos informados! Nos preocupamos de que, desde la más temprana edad, sean instruidos con detalle en la fisiología del amor, del sexo y de los nacimientos. Lo saben todo...
Pero curiosamente, cuando estas mismas criaturas preguntan hoy dónde está el abuelo, o por qué ya no lo pueden ver, se les contesta que se fue a un largo viaje o que está descansando en los jardines del recuerdo. ¡Cuentos! Igual que el de la cigüeña. Ahora se prohíbe hablar de la muerte con naturalidad, mientras que en otro tiempo, también los niños asistían, con los demás seres queridos, al último adiós en la habitación y a la cabecera del moribundo. Ahora se oculta la muerte como si no existiera, como si nosotros no fuéramos hacia su encuentro. Total, que el tabú del tiempo presente ya no es el sexo, no; sino la muerte. Y junto con ella el dolor, el sufrimiento, la enfermedad.