Abolición del aborto, también desde la laicidad

Autor: Josefa Romo Garlito

 

Las leyes del aborto  contradicen  el derecho a la vida, señalado claramente en al Declaración Universal de la ONU sobre los Derechos Humanos (1948), que no excluye a los niños.   Además, se abunda en ello en la Declaración de los Derechos del Niño (1959): " El niño por su falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidado especiales, incluso la debida protección legal, tanto antes como después del nacimiento" . También dice que " deberán proporcionarse, tanto a él como a su madre, cuidados especiales, incluso atención prenatal y postnatal" . ¿ Qué más habría que decir? El aborto se realiza por intereses espurios y es un sucio negocio, impropio de sociedades avanzadas, aceptado o promovido en democracias corruptas y en países totalitarios. Ese  asesinato de nonatos, representa  un holocausto silencioso. ¡Qué vergüenza para nuestra sociedad opulenta y civilizada, esa muestra de pobreza humana y  degradación moral !  Los católicos y otros creyentes  rechazan el aborto porque es un crimen horrendo y va contra la ley de Dios: "No matarás". Pero, unidos a todos los hombres   de buena voluntad, también lo rechazan porque atenta  contra el derecho principal del ser humano, el derecho a la vida. Nadie tiene derecho a disponer de la vida de nadie, ni vida humana alguna carece de dignidad. El aborto es una ofensa grave a la razón, como lo fue la esclavitud, abolida ya; También se abolió la pena de muerte; pero, incomprensiblemente, se aplica, mediante el aborto,   al ser humano más inocente. No sólo la Iglesia católica es defensora de la vida; también, otros; por ejemplo, el filósofo y jurista  Bobbio,  contrario al aborto y recientemente fallecido, que consideraba el derecho a la vida algo así como un dogma laico.

Una democracia que permite el ensañamiento y asesinato de niños nonatos, es una democracia corrupta, como lo son los partidos políticos que por acción u omisión sostienen el aborto.   El aborto responde a intereses espurios, enmascarados  de preocupación por la mujer. Esos partidos están abocados a su propia destrucción, como lo estuvieron los sistemas políticos corruptos de la Historia. Una democracia que no respeta su fundamento, la defensa a ultranza de los derecho humanos, ¿ podrá subsistir?

 Lo que asusta de las clínicas abortistas inspeccionadas, no es tanto la conculcación del derecho positivo cuanto el crimen de lexa humanidad que es y significa el aborto, asesinato masivo de niños ( bastaría el de uno solo para echarse a temblar) .

Ante la gravedad del crimen del aborto no caben rebajas en la ley sino la abolición de la misma, como reclaman abiertamente las Asociaciones Evangelium Vitae,   Cultura de la Vida, etc.,  y una mayor atención a la mujer embarazada con problemas.

Que no, que no se aborta por motivo de salud como se alega en el 98% de los casos, sino por cualquier cosa. La ley del aborto ha tenido como efecto la relajación de la conciencia moral. En Baleares,  el 97% de los abortos no alegan causa alguna: son  "sin causa".

Como se abolió la esclavitud por ir contra la dignidad humana, se ha de abolir la ley del aborto en España y en toda sociedad democrática y civilizada.