La nueva amenaza contra la vida: Los fármacos abortivos 

Autor: Adolfo Castañeda

Fuente: Vida Humana Internacional

 

 

Una nueva y silenciosa amenaza se cierne sobre los bebés por nacer: los fármacos abortivos. Existe el peligro que el público norteamericano la pase por alto debido a que el aborto quirúrgico llama más la atención. Pero el aborto químico se está constituyendo, en los EE.UU. y en el resto del mundo, en el asesino número uno del futuro. Necesitamos denunciarlo y luchar contra él. 

Desde los años 70 y con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han realizado investigaciones con el propósito de bloquear la concepción o de inducir el aborto inmunológicamente. Las recientes iniciativas de los Drs. Vernon C. Stevens, de Ohio State University, y G.P. Talwar, del Instituto Nacional de Inmunología, en Nueva Delhi, India, han hecho aún más inminente esta nuevo ataque contra la vida por nacer.1 

El objeto de estas investigaciones ha sido la hormona gonadropina coriónica humana (GCh). La GCh es la señal que el embrión en desarrollo le envía al útero, para que éste mantenga el crecimiento necesario de sus vasos capilares durante los primeros meses del embarazo, de esta manera el embrión puede implantarse y desarrollarse en él. Si los niveles de la GCh bajasen durante las primeras 6 a 10 semanas, el diminuto bebé moriría y sería despedido de la cavidad uterina durante la menstruación, produciéndose un aborto temprano.2 

Los investigadores mencionados están buscando la manera de que esto ocurra intentando hacer que el sistema inmunológico de la madre ataque y destruya esta hormona, como si fuera una enfermedad.3 Los últimos "avances" de estas investigaciones ha dado como resultado una vacuna abortiva, la vacuna GCh, la cual pronto podría tener un efecto de hasta dos años en seres humanos. Las usuarias podrían estar abortando en cualquier ciclo en que el óvulo sea fecundado, o sea, prácticamente cada mes o alrededor de 12 veces al año. El Dr. Talwar ha declarado que varias compañías farmacéuticas de prestigio internacional de Korea, Indonesia, Francia y Holanda se han interesado en su vacuna.4 

Los Drs. Stevens y Talwar se jactan de que su producto es de fácil aplicación, de larga duración y que sus efectos colaterales son mínimos (aunque en realidad no se han hecho estudios de largo plazo sobre esto).5 Con estos antecedentes no les será difícil a las grandes compañías norteamericanas y las organizaciones antivida, como Paternidad Planificada y el Consejo de Población lograr introducir su vacuna abortiva en los EE.UU. 

No es difícil darse cuenta de que los controladores de la población usarán esta vacuna antivida en el tercer mundo, incluyendo Latinoamérica. En esos países será aún más difícil controlar su uso y evitar los posibles efectos negativos a largo plazo que la vacuna GCh pudiera tener. 

Pero la vacuna GCh no es la única arma antivida que los controladores de la población podrían usar en EE.UU. y otros países, sobre todo en el tercer mundo. Investigadores de la Universidad de California en San Francisco, han estado experimentando con fármacos tóxicos con el objetivo de producir un fármaco combinado abortivo a bajo costo. Uno de los fármacos utilizados en este mortífero "cocktail", methotrexate (MTX, Rheumatrex), es un agente anti cáncer que destruye rápidamente las células que se multiplican, como las células fetales. El otro fármaco, misoprostil (Cycotec), es una prostaglandina que produce contracciones y pulsasiones en el útero para expulsar al bebé por nacer.6 

Si estos experimentos siguen teniendo "éxito" en matar a los bebés por nacer, el nuevo "cocktail abortivo" podría reducir dramáticamente el costo del procedimiento quirúrgico del aborto, ya que el precio promedio de los dos fármacos combinados es de alrededor de $5.00 a $7.00.7 

Hay razones para pensar que este nuevo tipo de aborto químico llegará a ser otra arma común del arsenal antivida moderno. En efecto, el fármaco MTX se ha convertido, en los últimos 6 ó 7 años, en el "tratamiento" estándard para la destrucción de bebés no nacidos de embarazos ectópicos, o sea, embarazos fuera del útero.8 ¿Utilizarán los controladores de la población ésta y otras estrategias para exportar este nuevo producto antivida a los países del tercer mundo, incluyendo Latinoamérica? 

NOTAS:

1. Lawrence Roberge, "Abortifacient Vaccines Loom as New Threat," HLI Reports (November 1993): 1.
2. Ibid.
3. Ibid.
4. Ibid, 1-2.
5. Ibid, 2. 
6. "Finding Cheaper Ways To Kill the Patient - Medicine's Trend of the Future?," nota de prensa de la American Life League (La Liga Americana por la Vida); Nota de prensa de Pharmacists for Life (Farmaceutas por la Vida), octubre 28, 1993; "Methotrexate To Destroy Very Early Pregnancies," "Beginnings": Pharmacy Pro-Life News of Record (marzo/abril 1992): 1-3; Rachele Kanigel, "Abortion Experiment Finds New Drug Mix," Oakland Tribune, octubre 19, 1993, pp. A-1 y A-6; Sabin Russell, "UCSF Testing Chemotherapy Drug for Abortions," S.F. Chronicle, octubre 19, 1993, pp. A1 y A13.
7. Nota de prensa de Pharmacists for Life; Kanigel.
8. "Methotrexate To Destroy...", p. 2.