Getsemani
Autor: Padre Jesús Martí Ballester
Se eclipsó en el Hombre Dios.
Cortinas espesas de sangre
oscurecieron la faz del Padre...
El Hombre tirita despavorido...
Debilidad de un enfermo
que, con la fiebre agarrotada
a sus débiles miembros,
tiembla de frío y de miedo
ante un dragón que lo engulle.
Lámpara torturada de sangre
que amanece como rocío
de gotas redondas
que forman ríos desolados
y dolorosos
de un planeta hundido
en la soledad sideral.
Desolación inmensa de un océano
de torturas diabólicas
de campos de exterminio.
Presencia mística de todo el pecado
en la imaginación cinematográfica
del Hombre que ve lúcidamente
resquebrajarse horrorosamente
los cimientos del cosmos.
La negra traición disfrazada,
los matorrales espinados del odio,
la cínica hipocresía,
el fariseísmo de todas
las inmensas injusticias.
Soledad, silencio, angustia...
Abandono, desolación, sequedades...
Llamada a participar
en el trago amargo del Maestro,
hasta que te haga feliz
ser latido en su estertor.