“Difama que algo queda”

Autor: Jesús Domingo Martínez

 

 

A punto de entrar en vigor la ley del aborto me parece positivo conocer los siguientes datos, por si aún hay tiempo de rectificar “Donde la ley exige ese requisito, el descenso ha sido de hasta el 30%”

La exigencia del consentimiento paterno para abortar cuando la embarazada es menor de edad ha contribuido a ayudar a las chicas y a reducir así el número de abortos en los EE.UU. A esta conclusión llega un estudio del Family Research Council, que analiza los datos sobre el aborto recopilados en casi todos los estados entre 1985 y 1999.

El primer dato significativo es que en ese período de tiempo el aborto entre menores ha descendido un 50%. Diversas causas explican esa caída (mayor conocimiento de los anticonceptivos, difusión de los programas de abstinencia, etc.), pero entre ellas sobresale una: la aprobación de leyes que exigen cierta intervención (notificación o permiso) de los padres.

En los 36 estados que cuentan ya con este tipo de leyes, el índice de abortos ha descendido un 13,6%. La baja es todavía mayor (19%) en los estados que exigen el permiso de los padres cuando la embarazada es menor de edad y no sólo la notificación. De nuevo, el descenso es más fuerte (30%) en los estados donde se requiere la intervención de ambos padres y no sólo la de uno.

El estudio del Family Research Council no es el primero que analiza los efectos de las leyes que exigen la intervención de los padres. En 2006 otro estudio, realizado por investigadores del Baruch College (Universidad de Nueva York) y publicado en el New England Journal of Medicine (8-03-2006), mostró las consecuencias que tuvo en Texas una ley que exigía informar a los padres cuando una menor quería abortar. Desde 2000, año en que la medida entró en vigor, la tasa de abortos había pasado de 18,7 a 14,5 por mil chicas de 17 años; de 12,1 a 9 por mil de 16 años, y de 6,5 a 5,4 entre las de 15 años.