En la adopción, un niño adopta a una familia

Autor: Jesús Domingo Martínez

 

 

Ante la noticia sobre la primera adopción por parejas homosexuales, pienso conveniente hacer una reflexión. La adopción por parejas homosexuales provoca serios trastornos en los niños adoptados. Trastornos de identidad sexual, baja autoestima, estrés y problemas psicológicos, son tan sólo algunos de los problemas que sufren los niños adoptados por parejas homosexuales

Una plataforma ciudadana ha realizado un informe que lleva por título “No es igual. Informe sobre el desarrollo infantil en parejas del mismo sexo”. 
La conclusión científica a la que llega este estudio es que los niños criados por parejas de homosexuales tienen un desarrollo muy distinto de los que crecen en familias naturales y, en muchos aspectos, perjudicial para ellos.

El informe refleja también cómo los homosexuales tienen una predisposición mucho mayor a la inestabilidad o infidelidad de la pareja o los trastornos psicológicos. Muestra que en Suecia, el índice de rupturas es un 37% superior en los casos de homosexuales y un 200% en las parejas formadas por lesbianas.

Así las cosa, nos preguntamos: ¿Por qué no nos planteamos el derecho de los niños a ser adoptados o, mejor dicho, el derecho de los niños a adoptar una familia en vez del de los homosexuales a adoptar niños? Estoy convencido que 
esta medida redundaría en beneficio de los niños.